Viernes, 24 de enero de 2025
La vicepresidenta perdió a una dirigente de su círculo cercano luego de que Claudia Rucci abandonara su cargo como directora General del Observatorio de Derechos Humanos del Senado.
La exdiputada nacional Claudia Rucci presentó este jueves su renuncia «por motivos personales» a su cargo como directora General del Observatorio de Derechos Humanos del Senado, donde había sido designada por la vicepresidenta Victoria Villarruel. Desde ese lugar, Rucci era la principal aliada de la vice en su objetivo de impulsar la reapertura de causas vinculadas a crímenes de grupos guerrilleros durante los años 70 que prescribieron por no ser considerados de lesa humanidad.
«Hoy presenté la renuncia, por motivos personales, al cargo de Directora General del Observatorio de DDHH del Senado de la Nación. Mi agradecimiento a todos con los que compartimos el esfuerzo en pos de que los Derechos Humanos sean de todos y para todos! Muchas gracias», manifestó en sus redes la hija del exsecretario de la CGT, José Ignacio Rucci, quien fue asesinado por Montoneros en 1973.
La exlegisladora acompañó su despedida con un video que repasa su gestión en el órgano del Senado. En muchas de las imágenes se la ve junto a Victoria Villarruel, pero también aparece con familiares de víctimas de atentados terroristas y en distintos homenajes.
Rucci había sido desginada por Villarruel en enero de 2024 en el organismo que tiene entre sus funciones promover normas que garanticen los derechos contemplados en la Constitución Nacional y los Tratados Internacionales de Derechos Humanos, incorporados en luego de la reforma de 1994.
La elección de Rucci para esa tarea no fue casualidad, sino que se debió a su militancia en lo que el oficialismo llama «memoria completa», un movimiento que busca recuperar de la memoria de aquellas personas asesinadas en atentados y secuestros adjudicados a Montoneros y el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) entre 1969 y 1979 y enjuiciar a los responsables. Fue en el marco de esa causa que Villarruel hizo su carrera política al frente del Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv).
En ese marco, Villarruel anunció en agosto del año pasado durante un acto en el Senado que avanzaría en la reapertura de las causas relacionadas con asesinatos cometidos por estos grupos y manifestó que «todos los montoneros tienen que estar presos respondiendo por ensangrentar nuestra nación”.
Fue un mes después que la Cámara Federal de Apelaciones porteña decidió en septiembre poner bajo análisis reabrir la causa por la voladura del comedor de la Superintendencia de Seguridad Federal de la Policía Federal Argentina (PFA), sucedido el 2 de julio de 1976 por una bomba atribuída a Montoneros.
En ese marco, la vicepresidenta recordó este jueves los 36 años del ataque al cuartel de La Tablada y solicitó una reparación para las familias de los 13 militares, policías y civiles asesinados durante el copamiento llevado a cabo por el Movimiento Todos por la Patria (MTP) en 1989. “Las víctimas siguen sin ser reparadas, mientras los terroristas fueron indultados”, cuestionó.
Además, la salida de Rucci significó la pérdida de una aliada para Villarruel en la cámara alta en medio de la interna que lleva con el presidente Javier Milei y su entorno, lo cual cerca aún más a la vice.
En su momento, Rucci había dado su opinión acerca de la pelea entre la fórmula presidencial y aseguró: «Hay tirantez porque ella es una mujer sumamente sincera, dice lo que piensa entonces de pronto dice las cosas que dice, que a mi me causan gracia, pero seguramente a Milei no”. “No son diferencias de fondo. Ella tiene otra forma de hacer política, es más contenedora, puede ver al otro, puede escuchar al otro”, agregó la dirigente.