Lunes, 05 diciembre 2022
En una reciente investigación, científicos norteamericanos identificaron 290 variantes genéticas que indicarían quién tiene un mayor riesgo de padecer cáncer de próstata agresivo. Cuáles son los alcances de estos hallazgos
La nueva investigación podría proporcionar a los médicos una herramienta adicional para estimar el riesgo de una persona de contraer esta enfermedad mortal
La genética está abriendo infinidad de puertas a la ciencia para detectar con anticipación ciertas dolencias, encontrar nuevos tratamientos y establecer pautas de profilaxis.
En particular, los genes son una excelente manera de detectar el cáncer de próstata, según sugiere una nueva investigación de la Universidad de California (UC) en San Diego, Estados Unidos, que acaba de publicarse en JNCI: Revista del Instituto Nacional del Cáncer. La prueba involucró la detección de 290 variantes genéticas.
Después del cáncer de piel, el cáncer de próstata es el más común entre los hombres. Según la Sociedad Americana del Cáncer, cada año se diagnostican 268.490 casos y se producen 34.500 muertes. Para un hombre que vive en los EE.UU., según datos de los especialistas de la UC, las posibilidades de tener cáncer de próstata en el futuro son del 11% con un riesgo de muerte del 2,5 %.
Los nuevos descubrimientos podrían reemplazar el método de diagnóstico actual y evitar biopsias innecesarias
“Los hombres con mayor riesgo de cáncer de próstata metastásico o fatal son potencialmente los que más se beneficiarán de las pruebas de detección o la detección temprana“, indicó Meghana S. Pagadala, estudiante de medicina, con un posgrado en el Programa de Capacitación de Científicos Médicos en la Escuela UC de San Diego, y autora principal del estudio.
El cáncer de próstata a menudo se detecta mediante la prueba del antígeno prostático específico (PSA). El médico mide los niveles en sangre de una proteína específica. Cuanto más altos sean los niveles de la proteína en la sangre, mayor será la probabilidad de tener cáncer de próstata y viceversa. Sin embargo, esta prueba no es una herramienta de detección perfecta y puede causar falsos positivos y negativos debido a otras variables que influyen en los niveles de PSA.
“Las puntuaciones genéticas pueden proporcionar una medida objetiva del riesgo de cáncer de próstata y, por lo tanto, informar las decisiones de detección. Evaluamos si una puntuación de riesgo poligénico basada en 290 variantes genéticas (PHS290) está asociada con el riesgo de cáncer de próstata en una población diversa, incluidos los hombres negros, que tienen un riesgo promedio más alto de muerte por cáncer de próstata pero que a menudo son tratados como un grupo homogéneo de alto riesgo”, dijeron los investigadores en el trabajo publicado.
Las pautas actuales recomiendan que los médicos discutan las ventajas y desventajas de las pruebas de detección con sus pacientes (IStock)
Los autores del estudio realizaron una prueba genética que evaluó 290 variantes que están fuertemente asociadas con el cáncer de próstata en casi 591.000 hombres en el Programa Million Veteran. La mayoría de los veteranos eran negros, lo que corresponde a un grupo demográfico que a menudo tiene un alto riesgo de cáncer de próstata. La mediana de edad de los participantes fue de 69 años.
“Las pautas clínicas actuales para determinar la evaluación de riesgos individualizada se enfocan en la raza, el origen étnico y los antecedentes familiares. Hemos demostrado en este estudio, basado en una cohorte muy grande, diversa y longitudinal, que un puntaje poligénico agrega mucha más información. Los pacientes y sus médicos pueden tener una idea mucho mejor de qué personas tienen mayor riesgo de cáncer de próstata agresivo” explica Seibert.