Sabado, 09 diciembre 2023
Un deporte que volvió a ser furor desde la pandemia despierta interés por su rentabilidad. Aseguran que montar un complejo de canchas vale lo mismo que comprar un monoambiente, pero con ganancias muy superiores a un alquiler.
El pádel en los últimos años volvió a ser una moda donde las barreras de edad, sexo y características físicas se quebraron. El deporte es practicado por cientos de miles de fanáticos en todo el mundo. No sorprende que en el último tiempo también se haya vuelto una buena oportunidad de negocios también en Rosario. Las inversiones llegan desde deportistas retirados del mundo profesional hasta empresarios de bienes raíces, de esta forma crecen los proyectos para montar nuevos complejos de canchas en la ciudad y zonas aledañas como Funes o Roldán.
Según la mirada de especialistas del sector, una sola cancha puede levantarse con un desembolso base de u$s 15 mil. Si se tiene en cuenta que los clubes que dictan clases y alquilan sus espacios para jugar partidos tienen alrededor de cuatro canchas, la inversión es similar a lo que el mercado pide por un monoambiente a estrenar o un departamento de un ambiente. La diferencia radica en que la ganancia que promete es mucho mayor a la de un alquiler, por lo cual seduce a quienes tienen algunos ahorros guardados o a grupos de inversores que apuestan a proyectos en conjunto.
Radiografía del sector
Cristián Aquino fue jugador de pádel desde su infancia y promotor del deporte en los noventa y principios del 2000. En diálogo con suplemento Negocios de La Capital, indicó que no hay dudas de que hoy en día se volvió una buena oportunidad comercial, dado el auge que viene teniendo y que se remonta a la época de la pandemia, con la cuarentena. Hoy las paredes de las canchas son de vidrio y se utilizan materiales nacionales, con un tiempo de armado rápido. Otra ventaja es que son muy sencillas de montar y mudar, a diferencia de las antiguas canchas de material.
Cristián Aquino es dueño del complejo de canchas Obsesion club de Pádel.
Gentileza: Cristián Aquino
“Hoy una cancha rodeada de vidrio está entre u$s 15 mil y 25 mil, te armás un complejo de cuatro invirtiendo un mínimo de u$s 60 mil. El dato de color es que la facturación de un solo día te puede dar la misma ganancia que el alquiler mensual de un departamento que comprás por el mismo monto”, sostuvo Aquino, quien en la actualidad es dueño y coordinador de las canchas Obsesión Club de Pádel, ubicadas en Maipú y Cochabamba.
Otro entrevistado que dio su punto de vista sobre el sector es Andrés Pronzato, jugador y ex entrenador del actual jugador de pádel número uno del mundo, Agustín Tapia. Como apasionado de esta práctica, se lanzó a invertir en complejos ubicados en distintos puntos de la ciudad, buscando ofrecer una experiencia de calidad a sus clientes, desde la atención que brinda hasta las pistas de juego. Hoy en día es dueño de un amplio pool de canchas en barrios como Echesortu y Refinería.
“Las pistas nuevas de Blindex con alfombra sintética, que ocupan pocos m2 en comparación con otras, y el monto de inversión accesible, hacen de este deporte una oportunidad tentadora para generar un negocio. Por eso muchos fanáticos y también empresarios se vuelcan a gerenciar este deporte en la ciudad”, consideró Pronzato.
En el caso de Eduardo Schwank, ex tenista y ex integrante del equipo nacional de la Copa Davis, la decisión de invertir en un complejo de canchas premium en Roldán respondió, en parte, a los ingresos que genera el deporte. “Las canchas son profesionales y de excelente calidad, todas panorámicas y de césped, lo que ayuda mucho a evitar lesiones. Quiero seguir invirtiendo en clubes como el que armé porque el auge del pádel va a seguir”, detalló el deportista.
Ex jugador profesional de tenis y dueño del complejo Schwank Tennis & Paddle Center.
Cupos al 100%
Aquino sostuvo que el pádel comenzó a ganar reconocimiento en Argentina en el 2016, cuando se volvió un boom en países como España y se transmitían los torneos en la televisión nacional. Pero su práctica explotó con fuerza durante la pandemia, por ser una de las pocas actividades deportivas que respetaban el distanciamiento obligatorio.
“El tenis y el pádel fueron los primeros deportes en habilitarse y en las canchas te dábamos todo el equipamiento (pelota y paleta), entonces era muy resolutivo. Aparte no requiere un outfit especial, sino que se trata de estar cómodo, al jugarse en parejas de a dos es muy social, empezaron a venir grupos de familias y amigos que querían distenderse, compartiendo un momento juntos”, indicó el empresario.
Su creciente popularidad hizo que espacios destinados a su práctica tuvieran que hacer frente a la demanda sumando horas y agrandando el staff de profesores que instruyen a quienes están dando sus primeros pasos. En este sentido, Aquino aseguró que en la actualidad tienen seis docentes de pádel y piensa sumar más en los próximos meses, a la vez tuvo que agrandar la grilla de horarios para alquiler de canchas entre parejas. La hora y media para equipos cuesta $9 mil y la clase con un especialista vale $4 mil.
Lo mismo en el caso de Pronzato que pasó de tener 60 clientes diarios a más de 600 en la pandemia. Los turnos de hora y media para jugar cuestan $9600 en el horario pico, de 16:30 hs a 00 hs, mientras que los fines de semana ofrecen torneos del circuito Ment, productora a nivel internacional que convoca a cientos de personas en cada una de sus competencias.
Andrés Pronzato, a cargo de las canchas Lavalle Pádel.
Gentileza: Andrés Pronzato
“La facilidad de jugarlo, la corta distancia de desplazamiento que requiere, la dinámica que le brinda el rebote de la pelota en la pared, son factores que permiten que profesionales como Messi, Federer, y cualquier otra persona no deportista elijan practicarlo. No tiene requisito previo, es muy fácil de practicar, podes alquilar hasta la paleta en el mismo club, juntar tres amigos más y divertirte una hora y media sin parar”, consideró el referente.
Su expansión tiene un coletazo directo en el mundo de los medios, con cada vez más torneos y promotores de pádel a nivel nacional e internacional. Según Schwank ya hay tres circuitos mundiales que pueden verse en televisión y competencias que están repartiendo dinero a quienes juegan, generando una referencia interesante para los amateurs. “Por suerte tenemos un 90% de ocupación fija en las canchas por mes así que creo que terminó siendo un negocio rentable y cada vez más valorado”, aseguró el ex tenista.
Boom de inversiones
La ola de aperturas en predios para jugar al pádel se extendió del centro de Rosario a nuevos barrios de la ciudad e incluso localidades aledañas. Aquino contó que, junto a un grupo de inversores, sondean La Florida como posible plaza para abrir nuevas canchas mientras que, en Roldán, sobre la calle Santa Coloma 8536, frente al Autódromo inaugurarán un complejo premium.