Sabado, 06 julio 2024
- Dio vuelta un partido que se le hizo cuesta arriba por el gol de Akaydin en el primer tiempo.
- En el desenlace del partido, un cabezazo de de Vrij y un tanto en contra de Müldür le permitieron imponerse 2 a 1 en Berlín.
- Su próximo rival será Inglaterra, que se impuso a Suiza en los penales.
El festejo de los neerlandeses tras dar vuelta el partido.
No le resultó fácil. De hecho, hasta los 70 minutos Países Bajos estuvo eliminada de la Eurocopa 2024. Pero con golpes clave y resistencia en el final logró imponerse 2 a 1 a una Turquía combativa que dio lucha hasta el final del partido, apoyada por su enorme comunidad en Berlín. En el Estadio Olímpico donde se disputará la gran final del 14 de julio, el seleccionado de Ronald Koeman se clasificó después de 20 años a las semifinales, donde se medirá a Inglaterra, que más temprano venció a Suiza en los penales.
Pese a la resistencia que armó el técnico italiano Vincenzo Montella con una línea de cinco en el fondo y cuatro mediocampistas con una sola referencia en ataque -Baris Alper Yilmaz-, Países Bajos tardó un minuto en encontrar una filtración. Tras tocar con Gakpo, que lo habilitó con un taco, Memphis se escapó y eludió a dos rivales antes de sacar un derechazo cayéndose que se fue afuera.
Con ese planteo defensivo de su rival, el equipo de Ronald Koeman no tardó en hacerse dueño del juego. Con Bergwijn, Simons y Gakpo apoyando a Memphis en ataque, la apuesta pasaba porencontrar los espacios para llegar con claridad al arco de Fehmi Mert Günok, algo que se dificultó en el primer cuarto de hora de un partido cerrado y trabado.
Recién a los 20 minutos Turquía consiguió inquietar a los defensores neerlandeses. No fue Yilmaz el responsable de llevar peligro -pese a que son los pelotazos hacia él lo más peligroso del juego otomano- sino su 10, Hakan Calhanoglu, quien se animó al remate de media distancia al arco, que no encontró su destino, pero sí generó un córner por un rebote.
De hecho, el platinado del Galatasaray puso en aprietos al experimentado capitán Virgil van Dijk a los 29 minutos, una jugada que generó el tiro libre del mediocampista del Milan, que Verbruggen rechazó con los puños.
Pero el asedio ya era un hecho que se concretó con un cabezazo de Akaydin, a los 35 minutos, tras un córner pasado que Arda Guler volvió a poner en juego en el palo donde tanto el defensor le ganó a Dumfries.
Ronald Koeman, tras el entretiempo, decidió sacar a Bergwijn y poner a Wout Weghorst, el protagonista del famoso cruce con Messi en el Mundial de Qatar. Y el centrodelantero le dio verticalidad al equipo en los primeros minutos. Sin embargo, fue Turquía el que estuvo cerca del segundo, a los 10 minutos, con un tiro libre de Guler que hizo sonar el poste.
Parado de contra, el equipo conducido por Montella volvió a poner en aprietos a Países Bajos a los 19, cuando Yilmaz se escapó por la derecha y al capitán van Dijk no le quedó otra opción que cortarlo con falta, por lo que fue amonestado. Peor aún fue lo que siguió: el tiro libre ejecutado por Calhanoglu que en el rebote le quedó a Yildiz para probar desde afuera del área y el rechazo corto del arquero para darle la oportunidad a Ayhan de quedar a un remate del segundo gol de no ser por la intervención de Weghorst.
En el mejor momento de Turquía, sin embargo, llegó el empate. Países Bajos le pagó con la misma moneda a su rival: córner y cabezazo solitario de Stefan de Vrij para poner el 1-1 a los 25.
Sin conformarse con el empate que lo llevaba al alargue, como había ocurrido en las otras tres semifinales, seis minutos le bastaron al equipo de Koeman para darle otro golpe a Turquía. La jugada concluyó con el centro al segundo palo de Dumfries para Gakpo, que se aprovechó de un dormido Müldür para ganarle la posición y permitir el gol en contra.
Aguerrida y consciente de que no tenía tiempo que perder, Turquía salió a buscar el empate que le diera una vida más. A los 40, en una jugada que se inició en el mediocampo, Abdülkerim Bardakci condujo la jugada que el ingresado Kerem Akturkoglu centró para un remate que no llegó al arco pero sí le volvió al extremo del Galatasaray, a quien Jerdy Schouten le impidió el gol. Con el tiempo cumplido, en tanto, fue el arquero el que salvó a Países Bajos. Los cinco minutos adicionados se jugaron en el campo neerlandés pero el tiempo no alcanzó para doblegar a Verbruggen.
Veinte años después de su última semifinal, en la edición disputada Portugal, Países Bajos logró meterse entre los cuatro mejores del torneo europeo por sexta vez en su historia. Hasta ahora, solo una vez consiguió llegar a la final: fue en 1988, cuando eliminó al local Alemania y luego venció a la Unión Soviética en la final para ganar su primera y única Eurocopa.