Miércoles, 26 de marzo de 2025
Kicillof, Massa y Máximo Kirchner se reunieron el domingo en un encuentro forzado para saber personalmente qué quieren unos y otros. No hubo acuerdo. Desde la gobernación la desmintieron.
Lejos de un acuerdo, el peronismo kirchnerista renovador se encamina a tener que dirimir las cuestiones en unas primarias abiertas y simultáneas, aunque este martes en la comisión de Asuntos Constitucionales el expediente para suspenderlas tuvo su primera aprobación. Le falta pasar por otras áreas, como Reforma Política y, por último, Presupuesto, sólo en la Cámara de Diputados. Axel Kicillof insiste en votar a mediados de julio de este año de manera desdoblada, eliminando las primarias.
“Vos no me das bola… Sigan operando”, disparó uno de los que aseguran que hubo una reunión, el domingo, entre Kicillof, Sergio Massa y Máximo Kirchner. Para esta calificadísima fuente, “vos, hombre de poca fe, seguí creyendo que no va a haber acuerdo”, sostiene como si todo hubiera terminado con un principio de pipa de la paz.
“Es cierto que nadie dice nada… Y me parece que está bien porque todo es una mesa de operaciones, de un lado y del otro”, se confesó una diputada atenta a lo que le piden desde el otro lado de la Plaza San Martín, donde en las últimas horas empezó la pelea interna de la UOCRA La Plata.
En la Legislatura, al parecer, esa juntada no trascendió. Al menos así lo dejaron en claro diputados del peronismo kirchnerista renovador que en ese mismo momento estaban discutiendo sobre la posible suspensión de las PASO, aprobada en una de las tres comisiones en las que se debatirá el tema. Fue en Asuntos Constitucionales, que preside la kicillofista Susana González, y solo acompañados por los libertarios de Unión Renovación y Fe. González es aliada de Mario Secco, otro que se separó del armado tradicional de los Kirchner junto con Jorge Ferraresi.
“Por lo menos se juntaron”, le confesó un intendente que sabe algo más de lo que expresa. “La reunión fue la nada, se sentaron, hablaron, pero nada más. Ni un contrapunto ni una discusión. Nada. Es como si hubieran repetido lo que sabían de antemano pero personalmente”. Otro jefe comunal confirmó casi lo mismo, con menos detalles aún. Para el propio Massa, «es el inicio».
En diálogo con algunos dirigentes que lo llamaron para conocer su parecer, Ferraresi no se mostró muy contento con esa novedad. Para él, todas esas reuniones son poco productivas, por lo menos. Quizás por eso desde el gobierno provincial no confirmaron ni desmintieron que haya habido un encuentro. “Para nosotros, hasta el momento, no hubo ninguna reunión”, dijeron casi oficialmente.
“Estamos a punto de vivir una locura. Nuestros vecinos están a punto de tener que ir a votar tres veces”, le dijo a el periodista un legislador oficialista que prefiere que las elecciones sean concurrentes, coincidiendo con el calendario nacional, el mismo día y de una sola vez. Lo paradójico es que tanto él como otros compañeros de su bancada siempre defendían no solo el valor de las PASO, sino la necesidad de que la gente se exprese porque votar “nunca está de más”.
«¿Por qué tres veces?», le preguntó este cronista. «Es que si no hay acuerdo, seguro vamos a una PASO, y si Axel quiere desdoblar después, listo, ahí tenés las dos provinciales y la nacional en octubre». Para esta fuente, es improbable que, si nadie cede, pueda cerrarse algún acuerdo. Sin embargo, no ve la posible ruptura. Kicillof, a diferencia de otros gobernadores, no manda a operar en los bloques. Entonces le deja abierto a La Cámpora y al Frente Renovador que hagan y deshagan con el resto de los bloques opositores. Los tiempos son tan cortos que se podrían verse obligados a trabajar en unidad: forzada, pero unidad al fin.
En estos tiempos cambiantes, uno de los más encumbrados exponentes de La Cámpora le confesó a un aliado que “antes el problema era que nosotros nos peleábamos con otros compañeros que representaban otra cosa, menemistas, duhaldistas, los cordobeses, etc. Hoy es casi una pelea de familia”.
Hasta ahora, hay dos posturas irreductibles. La que comparten Massa y los Kirchner, que prefieren que la elección sea el mismo día de la elección nacional o, en todo caso, con posterioridad a la misma; y lo que decidió Kicillof, que es la suspensión de las PASO y el desdoblamiento de las elecciones provinciales de la nacional, una con la boleta tradicional, pero solo de dos cuerpos, y la otra, única con todos los candidatos en un mismo espacio.

Es muy poco probable que el cambio en el sistema político bonaerense vea la luz en el transcurso de este mes. Si se produce ese “milagro” es porque el oficialismo bonaerense consiguió los dos tercios de los presentes para su tratamiento, algo improbable por la reticencia del kirchnerismo y los renovadores y los demás bloques no oficialistas, entre los cuales están los libertarios de Milei y los que ya no están con ese proyecto, los dos radicales y el PRO.
«Si el gobernador no opera, quienes sí lo hacen trabajan exactamente para lo contrario, como pasó a fin del año pasado, cuando no pudimos sacar ningún tema, ni endeudamiento ni presupuesto», se sinceró un especialista en «la rosca». La fecha clave es julio, donde Kicillof pretende que se realicen las elecciones generales, sin PASO. Si no se suspenden, esa será la fecha para las primarias y la elección general se realizará en septiembre.