Sábado, 12 de Abril 2025
Nacido en Buenos Aires, pero instalado en Mendoza durante mucho tiempo, el inquieto artista falleció a los 32 años.
Una gran tristeza invadió este sábado a la escena de la música electrónica local y nacional, tras darse a conocer la noticia del fallecimiento de Rosa Rous. Si bien se desconoce la causa de su muerte, trascendió por parte de sus allegados que el multifacético artista estaba internado desde hace algunos días en estado crítico. En este sentido, el DJ, productor y emprendedor gastronómico expresó hace casi dos años, que su regreso de Mendoza a su Buenos Aires natal estuvo signado entre otras cosas por motivos de salud.
Fascinado desde pequeño por la música, Rosa Rous encontró en suelo mendocino el comienzo de su viaje por su otra gran pasión: la gastronomía. Con Francis Mallman como gran maestro, el inquieto creador desplegó una frondosa labor que lo llevó a ser una de las piezas clave en el armado de locales gastronómicos entre los que se destaca La Central Vermutería, que se encuentra en calles Mitre y San Lorenzo de la Ciudad de Mendoza.
Rosa Rous tocó en clubs y fiestas nacionales e internacionales.
La coctelería, otro de los talentos de Rosa Rous.
En su carrera como DJ, Rosa Rous tocó en distintos clubs y fiestas de nuestro país, así como también en Chile, México y Perú. Además, el artista siempre estuvo comprometido con la comunidad LGBTIQ+, y se desarrolló como como consultor creativo para emprendimientos culturales, comerciales y gastronómicos.
Rosa Rous, emblemático referente de la música electrónica.
Rosa Rous, un artista camaleónico.
Adorador de David Bowie, y de estilos musicales como el techno, el glitch y la electrónica psicodélica; Rosa Rous pinchó recientemente en Mendoza junto a una celebridad como DJ Hell, y también estuvo involucrado en la producción de una fiesta en la que tocó Miss Kittin en Buenos Aires.
Más allá de lo musical, Rosa Rous cultivó un sello absolutamente personal a través de su imagen, con sus infaltables boinas, sombreros y outfits tan glamorosos como extravagantes a la hora de ponerse detrás de las bandejas.