Si bien otros gremios del transporte, como ferroviarios o aeronáuticos, sí se sumarán a la protesta. También desde el sindicato aclararon que independientemente de lo que decida el gremio, los servicios de colectivos pueden verse afectados por otros factores: «Si los empresarios deciden no sacar los coches porque tienen miedo que los rompan o no quieren quedar mal con algunos sectores internos, es un problema de ellos o si los choferes deciden no prestar colaboración… pero el gremio no puede llamar a paro porque puede ser sancionado», aclararon las fuentes. .
Viernes, 4 de abril de 2025
El gremio de los choferes de colectivos dice tener «restricciones legales» para adherir a la medida. Es el sector clave para lograr una alta adhesión al paro general convocado por la CGT.
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) no va a adherir al paro general convocado para el 10 de abril por la CGT, porque aduce que debe respetar la conciliación obligatoria que dictó el Gobierno nacional en medio de las negociaciones salariales que enfrenta el sector. Según aclararon desde el gremio, la decisión no responde a una cuestión política ni a una postura frente a la medida, sino a limitaciones legales y estatutarias que obligan al gremio a acatar la conciliación obligatoria.
«La UTA no puede sumarse porque tiene una conciliación obligatoria que le impide adherir a la medida», explicó una fuente cercana al sindicato que venía negociando un aumento salarial para los choferes de colectivo. La UTA había convocado a un paro para el 28 de marzo en protesta por los bajos salarios, pero el Gobierno dictó la «conciliación obligatoria», un mecanismo que busca garantizar la prestación del servicio mientras se resuelven los conflictos.
Desde el gremio subrayan que la situación ya fue evaluada con asesores legales y dentro de la estructura sindical: «La normativa es clara y se aplica a cualquier tipo de paro. Según los estatutos y la legislación vigente, incluso podrían intervenir el sindicato si no se acata. Fernández no tomará ese riesgo», sostuvo la misma fuente en referencia al secretario general Roberto Fernández.
El impacto en el subte y otros servicios
Sin embargo, en principio la conciliación solo aplica al servicio de colectivos. Por lo tanto, los trabajadores del subte, que tienen un convenio distinto, sí podrían adherir.
Desde la UTA insisten en que la decisión no responde a una postura frente a la medida de fuerza, sino a una obligación legal. En ese sentido, remarcan que «la conciliación obligatoria se aplica al gremio, no al tipo de paro», lo que significa que no hay margen de interpretación para justificar una adhesión.