Martes, 10 enero 2023
El ministro de la Producción Daniel Costamagna dijo que la situación «es de extrema gravedad» en el área centro-norte. En el departamento Vera se secaron dos lagunas
La persistente sequía provocada por el fenómeno de «La Niña» afecta no solo la economía sino también el paisaje en el centro-norte del territorio santafesino. Desde el gobierno provincial indicaron que por lo menos «3.000 cabezas de ganado» se perdieron por la falta de agua. Sin embargo, no es la única consecuencia. En el departamento Vera, dos espejos de agua literalmente desaparecieron.
Ya a fines de noviembre, las elevadas temperaturas registradas forzaron a los productores de soja de primera del centro y norte provincial a paralizar los trabajos de siembra por falta de agua útil en los suelos, provocado en gran parte por la evaporación y la sequía, según indicaron entonces voceros del sector.
La vigencia en la Argentina del fenómeno atmosférico de «La Niña» durante todo 2022 generó que el año pasado haya sido el octavo más seco de toda la historia, lo cual se notó con mayor gravedad en sectores del Litoral y la región pampeana, según un informe del Servicio Meteorológico Nacional.
En esas regiones, los valores de precipitación fueron entre 500 y 600 milímetros por debajo del promedio, mientras que diciembre fue el mas cálido que se haya registrado desde 1961.
De acuerdo con los pronósticos del SMN para el primer trimestre de este año hay un 50% de posibilidades de posibilidades de que «La Niña» continúe vigente con su consecuencia de sequía y altas temperaturas.
Al referirse a la gran sequía que afecta el centro-norte de la bota santafesina, el ministro de la Producción santafesino, Dasniel Costamagna, señaló que «es una situación muy compleja. Cuando ocurre esto, el agua de abajo no sirve, la hacienda no la toma. Es muy feo verlo«.
«Estuve con productores, tratando de resolver algunos escenarios. Ahora se abrieron compuertas en Tostado para que el río (Salado) vaya recuperando un poco de caudal y de esta manera muchos productores tengan agua», comentó.
Advirtió que quienes no se nutren del Salado se encuentran en una situación mucho más compleja: «En los departamentos 9 de julio, Vera y parte de General Obligado el agua no sirve. Lo que queda es llevarles agua, se han hecho inversiones en camiones cisternas o buscando pozos de agua buena», dijo en diálogo con LT10.
Explicó que es «muy difícil precisar el número de mortandad, ya que va cambiando día a día. Hay productores que están en una mejor situación que otros. Algunos pueden tirar un tiempo más».
El funcionario destacó que en esa zona afectada por «La Niña» se encuentran unos 3 millones de cabezas de ganado. «A algunos productores seguramente se le murieron todas las vacas y a otros hasta un 70%«.
Sin ánimo de relativizar la crítica situación, informó que en la zona hay más de tres millones de cabeza de ganado. Para algunos, puede ser que se le murieron todas las vacas, o el 70 por ciento».
Una laguna que se quedó sin agua en el norte profundo
En tanto, otro de los efectos de la gran sequía fue que la laguna balneario El Cristal -declarada Reserva de Vida Silvestre en 1992- se quedara sin agua.
Se trata de un área protegida de la Municipalidad de Calchaquí, localidad del departamento Vera ubicada a poco más de 200 kilómetros de la capital provincial, y que abarca unas 15 hectáreas.
Desde las redes sociales, el investigador César Massi mostró una serie de imágenes donde muestra el estado en que quedó la reserva.
«Qué tristeza. Me dice el amigo @marcosmian1 que la laguna El Cristal, uno de los lugares más lindos de Santa Fe, finalmente se secó«, escribió en un posteo quien se presenta a sí mismo como «cultivador serial de árboles».
El naturalista también subió una fotografía donde da cuenta de otro espejo que se secó.
Se trata de la laguna el Palmar, ubicada en el distrito La Gallareta, también en el departamento Vera y en donde se encuentra la Reserva Provincial de Uso Múltiple Lunas, Lagunas y Palmares.
«Día 593: la laguna El Palmar también se secó, como casi todas las que forman parte de los Bajos Submeridionales. Aun con todo seco, las maquinas siguen ampliando canales para que este gigante humedal tenga vacas y no agua», escribió Massi en su posteo.