Viernes, 25 de Octubre 2024
Si tienes entre 40 y 50 años y tienes problemas para conciliar el sueño y permanecer dormido, eso no es una buena señal para la salud del cerebro a medida que envejece, sugiere una investigación reciente.
«Nuestro estudio, que utilizó escáneres cerebrales para determinar la edad cerebral de los participantes, sugiere que dormir mal se vincula con casi tres años de envejecimiento cerebral adicional ya en la mediana edad», señaló la autora principal del estudio, Clémence Cavaillès, de la Universidad de California, en San Francisco (UCSF).
La investigación fue financiada por el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento y se publicó en la edición del 23 de octubre de la revista Neurology.
El equipo de la UCSF se enfocó en 589 personas que tenían un promedio de 40 años de edad al comienzo del estudio. Todos completaron cuestionarios sobre sus patrones de sueño a los 40 años y luego nuevamente a los 45 años.
Las preguntas incluían: «¿Sueles tener problemas para conciliar el sueño?» «¿Sueles despertarte varias veces por la noche?» y «¿Sueles despertarte demasiado temprano?»
Las respuestas a la encuesta llevaron a los investigadores a elaborar 6 características del mal sueño:
Corta duración del sueño
Mala calidad del sueño
Dificultad para conciliar el sueño,
Dificultad para permanecer dormido
Despertar temprano en la mañana
Somnolencia diurna
Alrededor de los 55 años, todos se sometieron a escáneres cerebrales para medir qué tan bien estaban envejeciendo sus cerebros.
Tras ajustar los posibles factores de confusión como la edad, el sexo, la hipertensión y la diabetes, el equipo de Cavaillès encontró que las personas con cuatro o más de las malas características del sueño tenían cerebros que eran 2.6 años «mayores», en promedio, que los cerebros de las personas sin ninguna o solo una de las características.
Para las personas con dos o tres de las malas características del sueño, los cerebros tenían un promedio de 1,6 años más viejos a la edad de 55 años en comparación con aquellos que no tenían ninguna o solo una de las características.
Aun así, el estudio solo mostró asociaciones y no pudo probar que dormir mal envejezca directamente el cerebro.
Sin embargo, «nuestros hallazgos resaltan la importancia de abordar los problemas del sueño a una edad más temprana para preservar la salud del cerebro, lo que incluye mantener un horario de sueño constante, hacer ejercicio, evitar la cafeína y el alcohol antes de acostarse, y usar técnicas de relajación», señaló la coautora del estudio, la Dra. Kristine Yaffe, vicepresidenta de investigación en psiquiatría de la UCSF.
«Las investigaciones futuras deben enfocarse en encontrar nuevas formas de mejorar la calidad del sueño e investigar el impacto a largo plazo del sueño en la salud del cerebro de las personas más jóvenes», planteó en un comunicado de prensa de la revista.
Más información
Hay consejos para dormir mejor en la Fundación del Sueño.