Miercoles, 02 octubre 2024
El gobernador riojano se perfila como presidente del PJ nacional hoy conducido por una comisión de acción política que reemplazó a Alberto Fernández. Cristina estuvo en La Matanza lejos de Espinoza.
«Nadie quiere agarrarlo y él viene caminando desde hace varios meses. Tuvo estrategia, voluntad y nadie lo vio venir, así que, no se si es el que quieren todos, pero es el que con más fuerza levantó la mano», le reconoció a periodista un intendente peronista sobre la posibilidad de que Ricardo Quintela sea el próximo jefe del Partido Justicialista nacional.
Al parecer, la idea de que «Wado» De Pedro conduzca al peronismo no prosperó. Un poco por decisión personal del senador nacional pero, fundamentalmente, por la poca pasión que le despierta a Cristina Fernández de Kirchner tener la conducción del PJ ya sea en sus propias manos o a través de alguien de su extrema confianza.
Cristina estuvo en La Matanza.
Lo de Máximo Kirchner en la provincia de Buenos Aires es diferente. Él rediseñó toda su estrategia política con el armado en el principal distrito electoral del país luego de la salida de los Kirchner de su provincia natal, Santa Cruz.
Cristina Fernández de Kirchner estuvo en La Matanza, sola, y se juntó con el Padre Tano, en Isidro Casanova. Nicolás Angelotti la recibió y la acompañó en una recorrida por el barrio 17 de Marzo, uno de los emprendimientos realizados a través de la Secretaría de Infraestructura Socio Urbano que conducía Fernanda Miño durante la gestión de Alberto Fernández. Miño es una referente directa de Juan Grabois.
El Padre Tano tiene una relación de mucha amistad con Máximo Kirchner, quien a su vez no tiene diálogo con Fernando Espinoza, el intendente matancero que no fue anoticiado de la llegada de la expresidenta ni por el protocolo del Instituto Patria ni por el propio sacerdote.
«Quintela los primerió. Empezó a activar y nadie lo podía parar. ¿Qué le van a decir? ‘Vos no podes ser presidente del partido’. ¿Cómo se lo decís? ¿Cuál es el motivo de negarle la chance a un gobernador que ganó como lo hizo él?», le confió días atrás un importante operador del justicialismo nacional que también conoce de las tensiones que hubo para postergar el llamado a elecciones.
De sorpresa, ni la Policía Bonaerense sabía de su presencia.
Al no tener un candidato claro, ya que Cristina había dejado en claro que no le interesaba reemplazar a Alberto Fernández ni poner a nadie ahí, la idea que tenía De Pedro se desvaneció. Inclusive fue uno de los que pidió dilatar la renovación de la Comisión de Acción Política que hoy conduce al peronismo para marzo del año próximo. Hace dos meses, Axel Kicillof le dio su respaldo directo para que peleara por la conducción del PJ nacional.
El gobernador riojano ya consiguió unos cien mil avales para presentar su lista nacional. Con buena relación con sus pares del Norte, quienes lo ayudaron a recolectar la documentación necesaria, solo queda por resolver qué actitud adoptará su par de La Pampa, Sergio Zilotto, quien espera una orden final de la exvicepresidenta.
Ella viene demostrando que no necesita de un cargo para liderar. Ya en su momento su esposo Néstor Kirchner le había mandado al peronismo orgánico, cuando recién había asumido la presidencia y todos le respondían a Eduardo Duhalde, que «se metan el partido en el culo». Cristina no lo dice de la misma manera, pero lo deja en claro en cada momento. En 2017, cuando se presentó por Unidad Ciudadana, el sello del PJ lo utilizó Florencio Randazzo.
«Creo que las palabras del papa Francisco calaron hondo. El desamparo de los sectores más empobrecidos es desesperante. Y en medio de una crítica despiadada a toda la política por la distancia que tiene de la gente, está bueno que ella haya empezado por acá su camino para el año que viene», le dijo a periodistas una gran conocedora del barrio.
Por su parte, Máximo Kirchner está organizando para el 4 y 5 de octubre un encuentro político con los referentes de Monte Hermoso y toda la región sur, conocida como la Sexta Sección Electoral que domina Bahía Blanca. Justamente el intendente local, Federico Susbieles, uno de los que más se enojó con Axel Kicillof luego que el gobernador se negara a apoyar el RIGI nacional, será de la partida junto con Alejandro Dichiara, el anfitrión y actual presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires.
En la Sexta sección electoral hay 22 intendentes que pertenecen a Unión por la Patria, de los cuales varios son del Frente Renovador y no van a este tipo de convocatorias. De los que son del peronismo K, «la mitad, seguro, no va a ir», confesó un gran conocedor de la región.
Justamente ahí irá el jueves Gabriel Katopodis, el ministro de Infraestructura que el sábado pasado armó un plenario de la Primera Sección Electoral, zona norte y oeste, para motivar a la militancia a buscar otro camino dentro del peronismo y, además, potenciar a Kicillof en su disputa contra el hijo de los dos presidentes.