Viernes, 20 enero 2023
En un partido luchado y friccionado, el equipo de Gago se consagró campeón de la Supercopa Internacional con un penal que definió Gonzalo Piovi. Lo ganaba el Xeneize con un golazo de Roncaglia, pero la Academia lo dio vuelta.
En un encuentro dramático y luchado en Abu Dhabi, Racing le ganó 2 a 1 a Boca con un polémico penal en el último minuto y se consagró campeón de la Supercopa Internacional con los goles de Johan Carbonero y Gonzalo Piovi. Para el Xeneize marcó Facundo Roncaglia en el primer tiempo, pero la Academia se repuso rápido y en el final se quedó con el título.
Boca empezó mejor, con un Villa amenazante por el costado izquierdo, generando faltas y desbordes, con un 4-4-2 bien marcado cuando tenía que defenderse.
Del otro lado, la Academia buscaba salir rápido con balones hacia Carbonero, disputando la posesión de la pelota e intentando imponer su juego.
El Xeneize, con un débil remate de Varela y otro más peligroso de Villa que desvió Leonardo Sigali, avisó bien claro con un cabezazo de Facundo Roncaglia a los 15 minutos. Y del tiro de esquina que se generó de esa jugada, el equipo de Ibarra se puso en ventaja: centro pasado que quedó para Sández, quien desvió y se la dejó en el segundo palo a Roncaglia, que pegó un tremendo remate de volea de derecha, imparable para Gabriel Arias.
Inmediatamente, Racing comenzó a buscar el empate y lo consiguió enseguida a través de Johan Carbonero. A partir de un buen pivoteo en la mitad de la cancha de Maximiliano Romero con un anticipo para bajarle la pelota a Maxi Moralez, Frasquito lanzó en velocidad al delantero colombiano, que quedó mano a mano con Javi García y definió bien para el 1 a 1.
El partido empezó a ser friccionado y un poco más impreciso, con pierna fuerte de ambos lados y bastantes faltas que cortaron el juego.
En escasos momentos, por no decir en ninguno, Racing se pareció al equipo que Gago armó en 2022. Sin Alcaraz, sin Copetti, pero con una importante base del torneo pasado, a la Academia le costó armar juego y generar situaciones de peligro, ni hablar de controlar la pelota y mostrarse como un equipo marcadamente ofensivo.
Del otro lado, Boca mostró la misma impronta de la era Ibarra, con el pragmatismo como bandera, luchando cada pelota y construyendo lentamente de cara al arco rival.
Con algunas atajadas importantes, Javier García se convirtió en una de las figuras de Boca: tapó un difícil tiro libre de Carbonero, más un remate de Oroz en la segunda etapa.
Si bien Racing se mostró más dominador de la pelota en el segundo tiempo, tampoco pudo parecerse a ese equipo vertical que fue en 2022 y que le dio buenos resultados. Este viernes fue uno de esos encuentros en los que no encontró los caminos, que lo tuvo sin la profundidad de otras buenas tardes y noches. Carbonero, que había sido el mejor en los primeros 45, se cayó bastante en el complemento.
En la más clara de la segunda mitad para Boca, Juan Ramírez disparó con violencia desde afuera y la pelota se fue cerca del palo izquierdo de Arias.
A falta de 10 minutos para el final, Carbonero tuvo la mejor para la Academia tras un pase fenomenal de caño de Maxi Moralez: el colombiano eludió a Javi García y casi sin ángulo definió sin arquero al costado de la red. Gago, por supuesto, se agarró la cabeza ante la oportunidad perdida.
Racing buscó ganarlo con los ingresos de Reniero en primer lugar y más tarde con Jonathan Gómez y Gabriel Hauche. Y en el último minuto, la polémica del partido. Jonathan Gómez la tiró atrás para que alguien la empujara, pero la pelota rebotó dos veces en Sández, la segunda en la mano, y el árbitro Fernando Rapallini dio penal.
Después de varios minutos de discusión, Gonzalo Piovi se hizo cargo del penal, que generó recuerdos del pateado por Jonathan Galván en la definición de la Liga Profesional ante River. El lateral, que había dicho que «le rompía el arco» a Armani aunque finalmente no pateó, lo hizo esta vez con García, que no llegó a atajarlo por la velocidad del remate.
Así, la Academia aguantó el embate final del equipo de Ibarra y se llevó una nueva estrella para sumar a sus vitrinas. ¡Racing campeón!