Viernes, 13 de Diciembre 2024
Mientras Kiev sigue insistiendo en que solo la entrada a la OTAN es una solución a largo plazo para su seguridad, el país «estudiará y trabajará» con la idea de albergar a tropas aliadas antes de unirse a la Alianza.
La idea de que países aliados envíen tropas a Ucrania está ganando terreno en el país presidido por Volodimir Zelenski, aunque la duda recae sobre si ello supondría una contribución significativa al fin de la guerra con Rusia.
Según señaló Oleksandr Merezhko, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento ucraniano, hasta que Kiev no ingrese a la OTAN, el resto de opciones de garantías de seguridad -incluida la presencia de soldados extranjeros- están sobre la mesa.
En diálogo con la agencia EFE, el funcionario se mostró es escéptico con respecto a la posibilidad de que esta pueda convertirse en una solución a largo plazo. «No podemos renunciar a unirnos a la OTAN, ya que toda nuestra experiencia demuestra que es la única garantía verdaderamente fiable», subrayó.
«Carecemos de armas»
Las garantías de seguridad siguen siendo un tema central en Ucrania, ahora que la recuperación de los territorios bajo ocupación rusa parece cada vez menos posible en el futuro cercano, ya que Rusia sigue avanzando en el campo de batalla y los aliados vacilan a la hora de incrementar su apoyo militar.
«Carecemos de armas, carecemos del estatus del que estamos hablando, es decir de una invitación a la OTAN, y de garantías claras que pudiesen asegurar que estamos seguros de que (el presidente ruso Vladimir) Putin no volverá en dos o tres años«, dijo Andrí Yermak, jefe de la oficina presidencial ucraniana este jueves a la cadena Suspilne, donde argumentó que la posición de su país todavía no es lo suficientemente fuerte para emprender conversaciones de paz con el Kremlin.
Mientras Kiev sigue insistiendo en que solo la entrada en la Alianza Atlántica es una solución a largo plazo para su seguridad, el país «estudiará y trabajará» con la idea de albergar a tropas extranjeras antes de unirse a la coalición, según afirmó el lunes el presidente Zelenski.
«Ucrania está dispuesta a hablar de cualquier cosa que funcione», declaró al digital Politico la viceprimera ministra Olga Stefanishina, a cargo de la integración euroatlántica.
Qué aportarían las tropas extranjeras en Ucrania
Según Oleksí Mélnik, experto en seguridad internacional del centro de estudios Razumkov de Kiev, las tropas extranjeras podrían ayudar a Ucrania con solo estar estacionadas ahora mismo en las zonas más seguras del país, como las regiones occidentales, o en la frontera con Rusia, liberando así a efectivos ucranianos para estabilizar el frente.
Sin embargo, en los 10 meses transcurridos desde que la idea fue lanzada por el presidente francés, Emmanuel Macron, no se adoptaron «pasos prácticos», señaló Mélnik.
Por su parte, Kiev nunca planteó la idea -al menos públicamente- y Zelenski explicó en su momento pasada que afectaría negativamente al apoyo que recibió su país.
Durante unas potenciales negociaciones de alto el fuego, Rusia probablemente se opondría a la presencia de tropas polacas, francesas o británicas en suelo ucraniano, dijo el analista político Volodimir Fesenko a la cadena RBC.
«Dado cómo Rusia ha ignorado repetidamente el derecho internacional, nada les impedirá ignorar a estas tropas, en especial si son pocas y su mandato no está completamente claro», subrayó asimismo el oficial ucraniano y bloguero militar conocido como Alex.
Por ello, estos efectivos podrían quedarse al margen, o bien escapar, si Rusia lanza una nueva invasión en el futuro, añadió.
De esta manera, Ucrania cuenta con pocas opciones, más allá de seguir trabajando con una «coalición de voluntarios», que podría incluir a los Estados bálticos y nórdicos, así como a Polonia y Reino Unido y potencialmente Países Bajos y Alemania, en el suministro de armas y la posibilidad de enviar soldados.