Jueves, 3 de abril de 2025
Con la llegada de la nueva estación, muchas personas experimentan fatiga, falta de energía y cambios en el estado de ánimo. Esta condición es el resultado de la adaptación del organismo.
Cómo combatir la astenia otoñal.
Con la llegada del otoño, el cuerpo humano debe adaptarse a nuevas condiciones climáticas y variaciones en la luz solar. Este proceso de ajuste puede generar lo que se conoce como astenia otoñal, un trastorno transitorio caracterizado por fatiga, apatía y una sensación general de agotamiento.
Esta condición surge principalmente por la dificultad del organismo para acomodarse a los cambios de estación, afectando de manera considerable la vitalidad y el estado de ánimo del día a día.
Cómo combatir la astenia otoñal.
Manifestaciones y efectos de la astenia otoñal
Aunque no se trata de una afección grave, los síntomas pueden impactar la vida cotidiana. Entre las principales manifestaciones se encuentran:
- Cansancio extremo y falta de energía.
- Dolor muscular y sensación de pesadez en el cuerpo.
- Irritabilidad y cambios en el estado de ánimo.
- Hipotensión y sensación de mareo.
- Dolor de cabeza frecuente.
- Dificultad para concentrarse y disminución del rendimiento académico o laboral.
- Trastornos del sueño, con insomnio o somnolencia excesiva.
- Alteraciones en el apetito, con aumento o disminución del mismo.
- Disminución de la libido.
El impacto de estos síntomas en la calidad de vida puede generar desconcierto, ya que muchas personas pueden no identificar de inmediato la causa de su malestar. Sin embargo, la astenia otoñal suele desaparecer de forma natural en un período de 10 a 15 días, una vez que el cuerpo se ajusta a las nuevas condiciones ambientales.
Cómo combatir la astenia otoñal.
Los factores que influyen en la astenia otoñal
Los cambios en la luz solar y la temperatura juegan un papel clave en la aparición de este trastorno. Durante el otoño, los días se acortan y la exposición al sol disminuye, lo que altera la producción de ciertas hormonas esenciales para el bienestar:
- Melatonina: se segrega en mayor cantidad debido a la reducción de la luz natural, lo que puede generar somnolencia y afectar el ciclo circadiano.
- Serotonina: su producción disminuye, lo que puede derivar en cambios en el estado de ánimo y aumentar la sensación de fatiga y decaimiento.
Además, las variaciones térmicas propician la aparición de resfriados y crisis alérgicas, lo que puede intensificar el malestar asociado a la astenia otoñal.
Cómo combatir la astenia otoñal.
Recomendaciones para mitigar sus efectos
Si bien este trastorno es pasajero, existen algunas estrategias para minimizar su impacto y favorecer una adaptación más rápida del organismo:
- Regular el sueño: dormir entre 7 y 8 horas diarias, estableciendo una rutina de descanso adecuada.
- Aprovechar la luz natural: exponerse al sol durante el día para estimular la producción de serotonina.
- Mantener una alimentación equilibrada: priorizar el consumo de frutas, verduras y alimentos ricos en triptófano, como plátanos y frutos secos, que ayudan a la síntesis de serotonina.
- Realizar actividad física: el ejercicio libera endorfinas, lo que contribuye a mejorar el estado de ánimo.
- Reducir el consumo de sustancias estimulantes: evitar el exceso de cafeína, alcohol y comidas copiosas antes de dormir.
Es importante señalar que la astenia otoñal afecta tanto a hombres como a mujeres, aunque es más común en estas últimas. En personas con antecedentes de depresión o trastornos de ansiedad, los síntomas pueden acentuarse, por lo que se recomienda consultar a un especialista si el malestar persiste más allá de lo habitual.