El estudio denominado Alex2, un test que permite detectar 295 alergenos, llegó a la Argentina en agosto y ya se realiza en Rosario. En Europa es ampliamente utilizado hace años y se considera que revolucionó el diagnóstico de las alergias.
Miercoles, 25 setiembre 2024
Se realiza con una muestra de sangre. Es un método de gran precisión y revela los «cruces» entre un alergeno y otro. Cuánto cuesta y cómo es el sistema
Ahora se puede saber con mayor precisión qué genera reacciones alérgicas en piel, a nivel respiratorio y otros
Es la prueba in vitro más avanzada y completa para tener precisión sobre las enfermedades alérgicas que se hace mediante una extracción de sangre simple, se procesa en laboratorio a nivel molecular y detecta «sensibilidades insospechadas y reactividades cruzadas».
Por el momento, no lo cubren ni las obras sociales ni las prepagas. El precio es de 650 mil pesos y hay un solo laboratorio en el país que lo realiza pero pueden enviarse las muestras desde Rosario. El resultado está en una semana «y ofrece un diagnóstico impensado años atrás por su precisión y alcance», destacan especialistas. Debe ser interpretado por un experto.
¿Qué significa este avance en relación a los tratamientos? El médico especialista en alergias, Gonzalo Chorzepa, quien participó del reciente Congreso Argentino en Alergia, Asma e Inmunología. explicó que «una de las cosas más novedosas y relevantes que se expuso en ese encuentro científico fue este estudio molecular que a través de un análisis de sangre permite detectar alergias de una manera que se denomina diagnóstico de alergias por componentes«.
El profesional señaló: «Si bien es técnicamente difícil de explicar podemos decir que, habitualmente, cuando uno prueba si una persona es alérgica al polen de plátanos o al pelo del gato o perro, está probando la reacción a un montón de cosas en una misma prueba. Por ejemplo, el pelo de perro tiene un montón de proteínas que generan la alergia, pero todas las personas alérgicas son distintas, entonces, un paciente puede tener alergia a algunas proteínas del pelo del perro y otros a otras proteínas. El estudio nos permite saber a qué reacciona puntualmente ese paciente y eso hace una diferencia enorme en el diagnóstico, en el tratamiento y en la calidad de vida. Esto aplica a muchísimas situaciones ya que se prueban 295 componentes».
Un ejemplo: «Algunas de las sustancias están solamente en los perros macho porque se trata de proteínas producidas por la próstata. Con este estudio uno puede saber con exactitud a qué tiene reacción y si es a la proteína que produce el perro macho, ese paciente podría elegir tener una hembra y no sufrir más la alergia».
El cambio en el tratamiento es sustancial, dijo el médico y se produce porque «ya no solamente podés hacer una modificación en el fármaco que se utiliza sino en recomendaciones puntuales».
Lo mismo puede ocurrir con los alimentos. «Las sustancias que producen alergias se llaman proteínas que son componentes de una sustancia. Una manzana tiene un montón de componentes que pueden dar alergia y las personas alérgicas tienen una combinación de sensibilización a cada proteína que es totalmente diferente de un alérgico a otro. En una persona, quizá, puede sentir un poco de picazón en el boca al comer la manzana y otra puede probar un pedacito mínimo y tener una reacción grave. ¿Los dos son alérgicos? Sí, pero cada uno lo es de un modo diferente. El test nos permite saber si el paciente va a reaccionar a la fruta cocida, a la fruta cruda, con cáscara o sin cáscara, con una ingesta mínima o comiendo una manzana entera».
Respecto de los pólenes, tan «agresivos» para las personas sensibles, el médico detalló que el test detecta reacciones cruzadas, por ejemplo, entre el polen del Abedul y una manzana o durazno lo que habilita a tratamientos novedosos en su diseño. «Tratando una cosa evitamos la reacción a otras», dijo. «De este modo podemos dar recomendaciones súper personalizadas».
En Rosario no se procesan las muestras pero un especialista puede derivarla a Buenos Aires donde ya existe un laboratorio que trabaja con este test. El precio en septiembre es de 650 mil pesos pero se estima que irá bajando en la medida de que más laboratorios se sumen a realizarlo y crezca la demanda por parte de los pacientes.