Viernes, 05 enero 2024
Tras revelarse las graves irregularidades, el Ministerio de Seguridad provincial pasó a disponibilidad a las autoridades de la Alcaidía, entre ellos, su jefe, el comisario Luciano Casterán, al igual que el jefe y subjefe de la Unidad Regional XVII de Policía de San Lorenzo
Una denuncia efectuada ante Asuntos Internos de la Policía de Santa Fe reveló presuntas irregularidades en la Alcaidía de San Lorenzo, entre las que figuran el “ingreso de menores y drogas a un pabellón VIP”, relajamiento de requisas y beneficios a presos.
La denuncia, que trascendió en las últimas horas, fue realizada el 1 de diciembre pasado por una oficial de la Alcaidía de San Lorenzo, ubicada en Urquiza al 700 de la vecina localidad, ante la Agencia de Control Policial (ACP), de Rosario.
Tras revelarse las graves irregularidades, el Ministerio de Seguridad provincial pasó a disponibilidad a las autoridades de la Alcaidía, entre ellos, su jefe, el comisario Luciano Casterán, al igual que el jefe y subjefe de la Unidad Regional XVII de Policía de San Lorenzo.
Según consta en la denuncia a la que luego tuvo acceso Télam, la numeraria acusa a Casterán de haber estado “en conocimiento” de las irregularidades denunciadas.
Entre las acusaciones de la oficial, figuran el presunto “ingreso de menores de edad, sin DNI, con certificado de extravío”, en pabellones donde asegura “había muchos detenidos con causas por abuso sexual”.
“Les decían eso las visitas al Jefe, nenas de 12, 13 y 15 años pasaban”, supuestamente “con el conocimiento” del jefe de la Alcaidía, situación que según la denunciante también “conocían otros de sus compañeros” de trabajo.
En ese sentido, la oficial dejó constancia de su temor, de que en ese entonces “cuando pasaban los/las menores” a la Alcaidía no sabe si en su interior “no las venden adentro por sexo”, por lo que afirmó: “Todo lo malo que pasa en una cárcel, pasa ahí adentro”.
Por otra parte, la denunciante dijo que cuando se requería apoyo al Grupo de Operaciones Tácticas (GOT) de la Policía para la requisa de los penales, “nunca se requisaba arriba” (piso superior de la Alcaidía), donde señaló la existencia “de un penal VIP”.
Esas requisas “solo el jefe las manejaba”, relató la denunciante.
Además, puntualizó que en esos pabellones VIP se encuentran “alrededor de 60 detenidos” y que la mayoría “es gente grande” con causas “por abuso, homicidios etc. y que son los que salen también”.
En otro orden, denunció el ingreso de “estupefacientes a los penales” y que cuando eso sucede “no hacen procedimiento, creo que se lo quedan ellos”, dijo la oficial, a la vez que reveló que “a la cocaína la pasan en botellas de cloro”.
También denunció que en una ocasión “la caja donde se guardan los celulares secuestrados en los pabellones No VIP apareció forcejeada. Hace poco abrieron la caja, sacaron celulares”, y pese a ser avisado el Jefe de la Alcaidía “no dejó que la controlen”.
“Los presos salen a tirar la basura, los sacan a que les cocine, salen varios”, detalló la agente policial y citó a dos internos que “son los que más frecuentemente salen de los pabellones”, aunque dijo desconocer “el recorrido que hacen”.
Por otra parte, la numeraria manifestó en su denuncia que el comisario Luciano Casterán mantenía una presunta “relación amorosa” con dos de sus subordinadas, a quienes le otorgaba “tratos preferenciales”.
El comisario Gustavo Rapuzzi, jefe e interventor de la Unidad Regional XVII de San Lorenzo.