Su modus operandi ocurría en Instagram, su plataforma principal, en donde promocionaba cursos y mentorías. Según la denuncia, Salazar les hacía creer que podían obtener el pago de intereses mensuales que superaban el 10% y podían llegar al 12%.
En uno de sus videos, Salazar exhibió la maniobra discursiva que utilizaba para captar la atención de quienes no la conocían. Lo hacía a través de su historia personal, mediante la cual buscaba generar cercanía y empatía para quienes soñaban con tener una vida similar a la de ella.
“¿Qué harías si una pregunta lo cambia todo? Hace cuatro años no sabía dónde iba mi vida hasta que me hicieron la pregunta correcta: ‘¿estás donde querés estar?’ En ese momento me di cuenta de que mi sueño de viajar por el mundo no se iba a cumplir si yo seguía exactamente en el mismo lugar. Tenía que cambiar”, relataba.
“Y ahí fue que tomé la decisión más loca de mi vida. En un mundo desconocido, donde muchos me dijeron que fallaría, me llamaron loca, me dijeron que era una estafa, pero algo dentro mío me decía que era por ahí. Y pasé de ser una más a una líder de más de 130 personas. Viajando a diferentes ciudades, viajando por el mundo y aprendiendo literalmente de los mejores”, continuaba.
“A pesar de todo lo que había logrado, sentí que mi alma me pedía algo más. Y la pregunta del inicio volvía a mi mente. ¿Esto es lo que realmente quiero? Y tomé la decisión más difícil de mi vida. Decidí escucharme a mí misma, atrás de todo lo que había logrado, mis éxitos, mi equipo, y realmente ir por mi propia. Hoy cierro este capítulo de mi vida. Pero mi historia apenas comienza. Porque el mayor de los éxitos es ser fiel a vos mismo. Así que hoy desde el corazón les digo gracias a todos. Y seguime porque vas a estar descubriendo la mejor versión de Cande Salazar”, completaba.
Debajo de su biografía, la joven publicó un link en donde se accedía a un sitio web que lleva su nombre. Allí ofrece una guía gratis llamada “De la oficina al mundo” y también un curso de marketing digital en el que asegura acompañar el proceso desde las redes sociales.
En su curso, el cual lo comercializaba como un producto digital, Salazar ofrecía la posibilidad de obtener el 100% de las ganancias a través del derecho de reventa. Es decir, vender de inmediato el mismo curso realizado.
“Cuando compres el curso tenés la oportunidad de revenderlo y quedarte con el 100% de cada venta”, indicaba. Luego precisaba: “Una venta es igual a 497 dólares. Cinco ventas es igual a 2485 dólares y diez ventas son iguales a 4970 dólares”.
“Con muy poca experiencia (y empezando con cero seguidores) podés tener grandes resultados. Te lo digo por experiencia propia”, completaba.
Salazar fue detenida en el aeropuerto “Ambrosio Taravella”, donde pusieron en alerta a las autoridades para evitar que el avión al que intentaba subir partiera hacia la Ciudad de Buenos Aires. Previamente, en un allanamiento, también capturaron a Nicolás Gionco (27), socio de la joven.
Los investigadores constataron que los engaños comenzaron a suceder a partir de mediados de 2022. También estimaron que ambos acumularon casi US$23.000 a lo largo de este tiempo, aunque la cifra podría ser aún mayor si se constatara que hay más estafados.