Domingo, 1 de diciembre de 2024
Candela Azoya fue vista por última vez en la tarde del miércoles pasado. Los investigadores creen que se trató de un ajuste de cuentas por una deuda por venta de drogas que tenían su primo y la novia.
El cuerpo de una adolescente de 17 años que estaba desaparecida desde el miércoles pasado fue encontrado en las últimas horas incendiado y descuartizado en Lomas de Zamora.
Los restos pertenecen a Candela Magalí Milagros Azoya, a quien la familia buscaba desesperadamente desde el 27 de noviembre. Los investigadores sospechan que se trata de un ajuste de cuentas narco.
Según indicaron medios locales, algunas partes del cuerpo fueron halladas en la basura en el cruce de la calle Facundo Quiroga y las vías del Ferrocarril Roca (Ramal Haedo), en la localidad de Villa Albertina.
Tras un llamado al 911, efectivos policiales llegaron al lugar y constataron la presencia de un pie, la cabeza y otras partes humanas semi calcinadas. Además, encontraron prendas de vestir que fueron reconocidas por la madre de la joven en un predio lindante a las vías.
A cargo de la investigación quedó el personal de la DDI de Lomas de Zamora, que inició tareas investigativas tras la denuncia efectuando relevamiento de cámaras, declaraciones testimoniales y tareas de campo.
Según las primeras pericias realizadas por la Policía Científica y el equipo de Antropología de la Policía Federal Argentina, Candela podría haber sido quemada viva.
Cómo fue la desaparición de Candela y cuáles son las sospechas de la investigación
La madre de la menor había radicado la denuncia por desaparición en la comisaría de Ingeniero Budge, en donde reportó que Candela se había ido de su casa el miércoles a la tarde hacia la Plaza Santa Marta, de las calles Virgilio y Copihue “a buscar unas zapatillas” y nunca volvió.
La versión de la familia coincide con la de la vendedora online, quien aportó una conversación de Whatsapp donde la joven le consultaba por un par de zapatillas para hombre. Sin embargo, la víctima nunca respondió tras recibir el mensaje con el valor del calzado, por lo tanto, la compra no se efectuó.
Según se supo horas después, la chica fue vista por última vez el mismo miércoles acompañada por un hombre y una mujer, caminando sobre calle Copihue con sentido hacia calle Voltaire. Luego se supo que se trataba de su primo Carlos y la novia.
Este familiar fue aprehendido horas después del crimen por orden de la fiscal interviniente, Carla Furingo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 1 de Lomas de Zamora.
De acuerdo a la investigación, se produjo un allanamiento en un domicilio de la calle Terrada al 2900, en Ingeniero Budge, que presuntamente era utilizado como bunker narco por dos hermanos y al cual Candela habría llegado acompañada de su primo.
Al parecer, familiares de la víctima tendrían una deuda por venta de drogas con los sujetos del lugar, por lo que se refuerza la hipótesis de un homicidio en el marco de un presunto ajuste de cuentas.
Los encargados del bunker narco habrían utilizado un carro de mano para tirar en inmediaciones de las vías férreas partes del cuerpo carbonizado de la chica, tras incinerarlo con combustible. La Policía busca de manera intensa a ambos líderes, por lo que montaron un operativo especial para dar con ellos.
Por otro lado, se habla de que otros familiares de la adolescente estarían vinculados con la venta de drogas, ya que a un hermano lo mataron meses atrás en otro presunto ajuste de cuentas y una hermana salió en libertad hace unos días tras purgar una condena por ese delito.
Este lunes, amigas de la víctima convocan a una marcha en Lomas de Zamora para pedir justicia por el crimen de Candela.