Lunes, 14 octubre 2024
Un alimento que se encuentra presente en la alimentación de los argentinos y que debe ser revisado por sus bajas propiedades nutritivas.
En el país del trigo, la harina es uno de los alimentos históricos en la mesa y recetas de los argentinos. Sin embargo, el paso de los años y las nuevas formas de consumo, ubican particularmente a las harinas refinadas en el banquillo de los acusados reduciendo su consumo por prevención, por el incremento de peso o las consecuencias perjudiciales para la salud.
En este contexto, vale mencionar que las harinas refinadas son aquellas que se someten a un proceso industrial creando partículas más finas y reduciendo los nutrientes, principalmente la fibra ya que se elimina el salvado y el germen. Precisamente esta es una de las características que diferencian las harinas refinadas de las integrales que todavía conservan sus nutrientes.
La Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard afirma que el consumo excesivo de las harinas refinadas está asociado con una mayor posibilidad de padecer enfermedades cardiovasculares, obesidad, diabetes y problemas digestivos o de colon.
Esto le pasa a tu cuerpo si consumís harina refinada todos los días
Consumir harinas refinadas en exceso todos los días provoca:
- Aumenta el riesgo de diabetes: las harinas refinadas contienen altos niveles de hidratos de carbono simples, los cuales producen picos altos de azúcar al no ser empleados como fuentes de energía para el cuerpo.
Según la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, el consumo excesivo de harinas refinadas puede provocar sobrepreso como consecuencia de su bajo valor nutriciona
- Sobrepeso: los hidratos de carbono presente en este alimento ralentizan el metabolismo y aumentan la glucosa de la sangre y elevan la acumulación de grasa sobre la zona abdominal.
- Estreñimiento: la falta de fibras en las harinas refinadas pueden provocar problemas de digestión, como estreñimiento e inflamación.
- Depresión: según un estudio realizado por la Universidad Autónoma de Nuevo León (México), el consumo excesivo de harinas refinadas alteran la química del cerebro y producen una sensación de cansancio físico y mental, lejos de otorgar energía al cuerpo.
Cuál es la diferencia entre harinas refinadas y harinas integrales
La principal diferencia entre las harinas refinadas y las harinas integrales es su procesamiento y la utilización de los granos que la componen. Las harinas refinadas se producen con granos de los cuales se ha eliminado el salvado (fibra) y el germen (nutrientes) dejando simplemente el almidón. Un ejemplo es la harina de trigo blanco.
Por otro lado, las harinas integrales utilizan todo el grano, motivo por el cual tienen una textura menos fina, pero conserva sus propiedades nutricionales como la fibra, vitaminas y minerales.