Martes, 24 setiembre 2024
Osvaldo Jaldo apuntó hacia los organizadores de eventos y dijo que recién las fiestas volverán cuando “estén dadas las garantías”.
El gobernador de Tucumán Osvaldo Jaldo prohibió las fiestas electrónicas en la provincia y explicó que la medida está relacionada a que “se venden drogas” y los jóvenes “corren riesgos”.
Este lunes Jaldo informó en una conferencia de prensa que se prohíbe la organización de fiestas electrónicas en Tucumán: “Lo primero es que debo decir es que son beneficios para algunos cuantos y perjuicio para mucha otra gente. En las fiestas ganan plata dos o tres personas y corren riesgo muchos jóvenes”.
En este marco, el gobernador resaltó que en esos eventos, mayoritariamente, “se vende droga y hemos tenido fallecidos en todo el país y en Tucumán”.
Jaldo explicó que la medida está relacionada a que “se venden drogas” y los jóvenes “corren riesgos”.
«Por eso, este gobernador va a prohibirlas hasta que no se garantice el 100% de lo que tiene que ver con la salud y la vida de quienes concurren”, advirtió.
Jaldo también apuntó contra los organizadores de los eventos y les pidió que “se hagan cargo”.
Acerca de cuándo podría revertirse la medida, el gobernador señaló: “Cuando las cosas estén en reglas y estén dadas las garantías, recién vamos a empezar a conversar si las autorizamos o no”.
«No vamos a exponer a los jóvenes tucumanos al consumo de droga por el interés de tres o cuatro personas que quieren hacer dinero. No vamos a ceder ni a claudicar venga de donde venga el reclamo”, finalizó.
La respuesta de los organizadores de fiestas electrónicas
El dueño de un club nocturno se hizo eco de la noticia y frente a este panorama manifestó: “Nos llama profundamente la atención que la prohibición sea el único camino que encuentra el Gobierno ante esta preocupación. Parecen haberse olvidado de la ley de las cuatro de la mañana y del nefasto resultado de la clandestinidad en Tucumán”.
En este sentido, Eduardo Mesón sostuvo que «si hay presencia de drogas en la provincia, es responsabilidad de las políticas públicas, no de un organizador de eventos”.
“En todas las instancias buscamos que el Estado colabore en la producción de eventos de cualquier tipo, aunque no hemos llegado a muchos resultados. Para mejorar la seguridad hay que trabajar coordinados, no prohibir”, expresó con enojo en diálogo con el medio Contexto.