Domingo, 16 junio 2024
La empresa ofrecía casas prefabricadas con montos accesibles para personas que soñaban con tener su primera vivienda. Ya son 170 las denuncias y siguen apareciendo presuntos estafados, con cifras que van desde los $2 hasta los $16 millones.
Una catarata de denuncias por estafas mantiene en vilo a Mar del Plata.
Una catarata de denuncias por estafas mantiene en vilo a Mar del Plata. Alrededor 200 familias denunciaron a una constructora por haberlas estafado en la compra de casas prefabricadas y con el avance de la investigación comienzan a aparecer pruebas de cómo sería su modus operandi.
Pese a que hay incumplimientos de obras desde 2021, con sus respectivas acciones legales, las denuncias por estafas comenzaron en marzo de este año y se incrementaron a gran velocidad con el paso de los días. “De un lunes a un jueves pasaron de 5 familias a 60 y para el fin de semana ya eran 200″, contó a TN Rebeca Sánchez, la abogada que representa a 90 damnificados del total, mientras se le siguen sumando potenciales clientes y calcula que puede llegar a 120.
Sánchez se vinculó con la causa de la peor manera: sus padres son parte del grupo de víctimas estafadas por la constructora Polo. “Ingresé a un grupo para ayudar a mis papás y me enteré de que había 200 familias en la misma situación. Cuando dije que era abogada me escribieron todos”, explicó. De todas maneras, aclaró: “No todos quieren involucrarse, hay personas que están tan dolidas que resignan la plata”.
Entre los damnificados hay personas de distintos puntos del país. Buenos Aires, Lobería, Necochea, Miramar y Pinamar son algunas de las localidades de donde son las familias que denunciaron ser estafadas. Tal es la magnitud que hasta hay víctimas que tienen vínculos familiares con los presuntos estafadores. “La contadora es mi prima”, “Uno de los vendedores es hijo de mi primo”, son algunas de las frases que tuvo que escuchar la abogada.
Radicadas en la fiscalía hay 170 denuncias con montos exorbitantes: “Las estafas van desde los $2 millones hasta gente que puso $16 millones porque era el 50% de la propiedad. Lo que es seguro es que todos pusieron más de $1.500.000″.
La abogada explicó que las construcciones supuestamente comprendían tres etapas, pero que “el 90% de los damnificados no tienen nada”. “El otro 10% se divide entre los que apenas tienen una tosca y otros con una platea”.
Las familias reclamaron enfrente de la sede de la constructora.
El modus operandi de la constructora acusada de estafar a 200 familias en Mar del Plata
De acuerdo a la denuncia que hicieron los damnificados, detrás de la presunta estafa están dos sociedades: Arraial S.A. y Cozzu. S.A. Ambas tienen dos socios cada una: Fermín Sánchez Cortijo y Nadia Lorena Díaz. “Son pareja y decían tener un emprendimiento familiar”, señaló Rebeca Sánchez a periodistas.
La Constructora Polo se constituyó oficialmente entre fines de 2019 e inicios de 2020. Poco tiempo después, una vez transitada la etapa más compleja de la pandemia, estableció dos sedes en distintos puntos estratégicos de la ciudad: una en la entrada de la ciudad y otra en el centro comercial del puerto.
La oferta de la empresa constaba de viviendas prefabricadas, pero las denuncias de las víctimas revelaron el modus operandi: “Ofrecían montos bajos, accesibles y distintos métodos de pago: 50% y cuotas, tres cuotas (50%, 25% y 25%), y hasta una opción que era 100% financiada con cuotas fijas y en pesos”, explicó la abogada de la víctima.
Esa combinación era solo la puerta de entrada para que el cliente se sienta tentado de poder acceder a una casa. “El 80% de las personas accedía a su primera vivienda”, indicó Sánchez sobre un dato que podría explicar la tentación que significaba la oferta.
Una vez que veían los métodos de pago y los precios bajo, la empresa le ofrecía al cliente un descuento importante en efectivo. “Eran descuentos del 20% y 25%. Ibas a la empresa con un bulto de dinero y no había constancia de que ese dinero ingresaba a las sociedades”, explicó la abogada.
La presunta estafa se concretaba con la falsedad de los recibos, los contratos y la falta de un escribano. Según Sánchez, “no te hacían factura y te hacían firmar un contrato que no tenían ni fecha ni estaba certificado por un escribano público”. “Todos los vendedores apuraban para pagar, permitían señar la casa con 10.000″, agregó.
A mediados de 2023 comenzaron los incumplimientos y la gente comenzó a contactarse entre sí. Según cuentan los damnificados, comenzaron a ir a las sedes de las constructoras y en febrero de este año se encontraron con que una de ellas estaba cerrada.
Fue de este modo que terminaron confluyendo una gran cantidad de víctimas en la puerta de la única sede que quedaba abierta. “Solo fijaban prórrogas hasta que a fines de abril dejaron de responder. Los vendedores bloquearon a todos los clientes”, contó la abogada.
Los escraches no se hicieron esperar en Mar del Plata. Carteles con leyendas como “chorros”, “estafadores”, comenzaron a circular por las calles marplatenses con la cara de vendedores, estafadores y tesoreros de la empresa. Hasta que en mayo empezaron las acciones legales.
La batalla legal: qué dijeron los abogados de la constructora
La semana pasada los abogados de la pareja que es titular de la constructora se presentaron en la sede legal con la intención de conciliar con los damnificados. Sin embargo, los denunciantes aseguran que mintieron en varias de sus declaraciones: “Dijeron que cerraron sus puertas por los escraches y en febrero habían dicho que cerraban por vacaciones del personal”.
Rebeca Sánchez reveló que el abogado de los acusados asegura haber entregado 300 viviendas, pero que el dato “está bajo condición de perito porque no se pudo verificar judicialmente”. La estrategia, según esgrimen los denunciantes, es que la causa no sea investigada por estafa, sino por incumplimiento del contrato.
“Ellos se hacen presentes en sede penal diciendo que de las viviendas entregadas, hay personas que le dan cuotas y esas cuotas van a ir a crédito para los damnificados”, contó Sánchez sobre el encuentro que tuvieron con los representantes de la constructora.
Para la abogada, los sospechosos “intentan conciliar para salir sobreseídos del delito de estafa porque quieren apuntar a que hubo incumplimientos contractuales a causa de la situación inflacionaria del país”.
Sin embargo, los denunciantes aseguran que incluso llegaron a ofrecer que les ajusten la cuota: “Querían que les cumplan con la casa, y la respuesta de la empresa era que la empresa estaba preparada para responder porque esta situación ya la contemplaban de antemano”
“El abogado de la constructora ofreció conciliar y dijo que tienen a cobrar 320.000 dólares. Calculamos que no va a alcanzar para resarcir a la cantidad de familias que estafaron”, explicó. Se intentó comunicarse con la constructora, pero al cierre de esta nota, no había respondido.
En términos judiciales, la abogada aseguró que la constructora operaba a través de dos sociedades anónimas que “tienen personería jurídica y patrimonio propio”. “Si estas sociedades solamente incurrieron en incumplimiento contractual, responden con el patrimonio de las sociedades, pero si nosotros logramos demostrar que hubo delito de estafa, estas sociedades y nosotros damnificados, podemos ir contra los socios y su patrimonio personal”.
“No quieren perder lo propio, y el abogado defensor de ellos anunció que como no hay estafa y están en una situación complicada, iban a presentar quiebra e ir a concurso de acreedores. Si es así, las familias van a cobrar dentro de muchos años, si es que lo cobran”, sentenció.