Miercoles, 24 abril 2024
En la Maternidad Martin se registraron 4 casos de transmisión vertical. Todos evolucionaron bien. En lo que va del año, 51 embarazadas requirieron internación. Qué pasa en el sector privado
Rosario atraviesa el brote más grande de dengue que se recuerde, algo que se replica en casi todas las ciudades del país.
Desde el inicio de la temporada se registraron 20.764 casos en la ciudad, con una tendencia a la baja en las últimas semanas.
Las embarazadas constituyen un grupo al que hay que prestarle mucha atención ya que al contraer la enfermedad pueden tener más complicaciones que quien no está en proceso de gestación.
Además del incremento de los riesgos para ellas (preeclampsia y hemorragias posparto, entre otros), las madres pueden transmitir el virus a su bebé recién nacido, lo que se conoce como dengue congénito.
En la Maternidad Martin, efector público municipal, nacieron cuatro niños con dengue en lo que va del 2024, algo totalmente inusual. Los cuatro evolucionaron en forma favorable, aunque uno de ellos tuvo que ser internado en neonatología.
A su vez, según detalló a periodista Lorna Andreussi, directora de esa maternidad, en los tres primeros meses del año se produjo un número de internaciones a causa del dengue que no se había registrado nunca: 51 embarazadas tuvieron que ser ingresadas al centro de salud (el 27% del total de las internadas). Dos pacientes fueron derivadas a otros efectores al requerir una mayor complejidad en su atención.
Diez tenían comorbilidades, como por ejemplo, obesidad, diabetes o hipertensión.
Con 31 casos, febrero fue el mes con más embarazadas con dengue que necesitaron hospitalización en el efector público para un seguimiento estricto, lo que permitió al equipo de salud controlar los síntomas de la virosis transmitida por el mosquito Aedes aegypti.
Entre las mujeres internadas el impacto de la enfermedad fue moderado o severo pero no se produjo ningún fallecimiento.
Por otra parte, la mayoría de las embarazadas que se infectaron en Rosario tuvo dengue leve por lo que se atendieron en forma ambulatoria.
Preocupadas
Marcos Gasparetti, médico obstetra, quien trabaja en el Sanatorio de la Mujer y en varias localidades del sur provincial, señaló que las consultas por dengue o sospecha de la enfermedad subieron en forma considerable en el sector privado entre las embarazadas, si se compara la situación con años anteriores, algo lógico porque hay muchos más casos por el brote pero también porque existe más preocupación, algo sumamente comprensible en este grupo ya que las futuras mamás temen por sus bebés.
«En el sanatorio, por ejemplo, tenemos cuatro o cinco consultas diarias de embarazadas con cuadros febriles, dolor de cabeza, dolor articular, que llegan con la sospecha de tener dengue», contó. En ese centro de salud no hubo internaciones por este motivo pero las pacientes que dieron positivo requirieron un seguimiento especial.
«También nos consultan con miedo por desinformación o porque escucharon que el dengue puede provocar malformaciones en bebés y eso no está comprobado. Sí ocurre con el Zika, transmitido por el mismo vector, pero esa es una enfermedad que no tenemos en este momento en la Argentina», señaló el médico.
«Los riesgos de complicación son mayores entre las embarazas con dengue y es por eso que se les hacen más controles que a otros pacientes si se confirma el diagnóstico», destacó el profesional.
Cuidarse más
Ambos profesionales señalaron la importancia de que las mujeres embarazadas, en cualquier etapa de la gestación, sean particularmente precavidas y cumplan con las medidas de prevención: descacharrar los domicilios para quitar todo reservorio de agua, poner mosquiteros, utilizar pantalones y mangas largas para cubrir el cuerpo, usar repelente (algunos médicos sugieren el de citronella) y extremar los cuidados si algún familiar que convive con ellas está cursando la enfermedad.
Si la pareja o un hijo tienen dengue es indispensable tomar todas las medidas para evitar que un mosquito pique a quien está enfermo y luego pique a la embarazada.
Otro dato relevante es que en este grupo está contraindicada la vacuna. «Sin dudas el tema me preocupa porque el dengue llegó para quedarse en nuestra zona y las embarazadas no pueden contar con esta herramienta de prevención», dijo Gasparetti a este diario.
En los días previos
El riesgo de dengue congénito, si bien es bajo, se produce cuando la mujer se contagia en los días previos al parto, entre una semana y 14 días antes. Ahí es donde aumenta la posibilidad de transmisión al bebé y hay mayores chances de hemorragias durante el parto.
De hecho, cuando se da esta situación se intenta evitar por todos los medios el parto por cesárea para así reducir la posibilidad de mayor sangrado.
«No todos los bebés que nacen de mamás con la enfermedad van a tener dengue: se da entre el 5 y el 25% de casos, dependiendo de muchos factores», comentó el obstetra.
En los recién nacidos los síntomas son: fiebre, aumento del tamaño del hígado y el bazo, erupciones cutáneas y disminución de los glóbulos blancos. En Rosario, los niños nacidos con la enfermedad la atravesaron sin mayores inconvenientes. «En los bebés suele ser favorable la evolución», destacaron los profesionales consultados.
Durante el primer trimestre la preocupación es otra porque se incrementa la posibilidad de abortos espontáneos. «La mayor o menor afectación está relacionada con la carga viral y el momento del embarazo en el que se produce el contagio», dijo Gasparetti.
Lorna Andreussi agregó: «El tratamiento que le brindamos es hidratación, paracetamol para bajar la fiebre y un mayor seguimiento. En realidad cualquier cuadro febril en la embarazada es para prestarle atención».
Y si la mujer está enferma luego del parto no se suspende la lactancia, destacaron los médicos.
En la agenda
El dengue durante el embarazo es un tema que comienza a tomar protagonismo entre los médicos obstetras. Este miércoles a las 20 en el Círculo Médico, la Asociación de Obstetricia y Ginecología de Rosario, brindará la charla «Dengue y embarazo» que estará a cargo de médicos residentes del Hospital Escuela Eva Perón, con la participación de profesionales del Hospital Roque Sáenz Peña y el Hospital Español.
Circulo médico de Rosario