Martes, 29 agosto 2023
Quien fuera en su momento reemplazante del asesinado candidato Fernando Villavicencio dijo que dejará de vivir en Ecuador por razones de seguridad: «Tengo que vivir con un chaleco (antibalas) y en las salidas abiertas con casco».
El excandidato presidencial del Movimiento Construye, Christian Zurita, ha afirmado este lunes que abandonará Ecuador por razones de seguridad después de recibir amenazas tras el asesinato a tiros de Fernando Villavicencio, su compañero de partido.
Zurita ha explicado en una entrevista con Ecuavisa que la presión y el peligro al que están sometidos tanto él mismo como su familia son «enormes». «Tengo que vivir con un chaleco (antibalas) y en las salidas abiertas con casco», ha sentenciado.
En este sentido, ha resaltado que una vez que termine de «cumplir» con sus responsabilidades, como liderar el trabajo de los asambleístas electos o publicar un libro que empezó a escribir junto a Villavicencio, abandonará el país.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) le otorgó el pasado 20 de agosto medidas cautelares ante «un ataque a la sede central de la campaña, la presencia de criminales en motocicletas frente a uno de los locales de campaña, robos selectivos y misteriosos» y «mensajes amenazantes», entre otros.
Zurita ya lamentó antes de los comicios en el país latinoamericano el tener que «vivir con un guardia de seguridad» y que los agentes de Policía tuvieran que entrar previamente a los espacios a los que tiene que asistir para «ver si son seguros».
El periodista tiene a sus espaldas una larga carrera, primero como reportero de Revista Vistazo, jefe de Investigación del Noticiero 24 horas o como redactor especial de ‘El Universo’ en temas de corrupción, crimen organizado y narcotráfico.
El excandidato presidencial, que sustituyó a Villavicencio tras su muerte, también fue miembro del equipo internacional de periodistas que destapó el caso Lava Jato, uno de los mayores escándalos políticos y financieros de la historia reciente de Brasil.
El asesinato de Villavicencio reivindicado por ‘Los Lobos’ –una escisión de Los Choneros, vinculada al Cartel Jalisco Nueva Generación– es un claro reflejo de la grave crisis de seguridad que vive el país, antaño uno de los más seguros de América Latina.