Miercoles, 28 junio 2023
El economista explicó la propuesta que ofrecerá al próximo presidente, más allá de quién gane. Súper Ministerio, reformas laborales, previsional y una reducción del Estado. El detalle sector por sector de lo que debería hacer el futuro gobierno. Una reunión de técnicos con sugestivas presencias políticas
Equipo completo. Carlos Melconian se mostró con el equipo completo de la Fundación Mediterránea
La presentación tuvo un gran despliegue, con figuras de peso del mundo económico y empresarios de todo el país, pero también del ámbito político. El economista Carlos Melconian reunió en una finca camino a Jesús María, en Córdoba, a un amplio y diverso equipo de colaboradores, con quienes terminó de armonizar un plan de gobierno para ser presentado al futuro presidente. Es una propuesta con el sello de la Fundación Mediterránea, el think tank que brilló en los 90, con Domingo Cavallo. Y que quiere volver.
Melconian, como presidente del IERAL, y María Pía Astori, en su doble rol de presidenta de la Fundación Mediterránea y anfitriona en la distinguida Estancia Belgrano, encabezaron el encuentro que sirvió para reunir a todos los integrantes del equipo y exponer públicamente el detalle, área por área, de las iniciativas que forman parte del plan económico.
Entre los aspectos centrales que mencionó Melconian del plan de gobierno está el reconocimiento del bimonetarismo, incluso con una eventual reforma del Código Civil que autorice los contratos en ambas monedas, y el impulso de un paquete de medidas de shock para cambiar la tendencia y retomar un sendero de crecimiento sostenible y, sobre todo, realista. El instrumento, aclaró, será con la regeneración del superministerio al estilo del que condujo Cavallo durante el menemismo.
María Pía Astori y Carlos Melconian encabezaron el encuentro en la estancia Belgrano que convocó a cientos de personas llegadas de todo el país
“Acá están las ideas y los que van a aplicarlas”, dijo la empresaria cordobesa. El economista, a su turno, advirtió que se trata de un conjunto de iniciativas que tiene como característica “tener los pies en la tierra, apelar al sentido común y reconocer la tabla del dos”.
Melconian reconoció en una conferencia de prensa con los medios que cubrieron la presentación, que mantiene diálogo con los dos precandidatos de Juntos por el Cambio, pero que el programa no fue elaborado sólo para la coalición opositora que se enfrentará en unas PASO entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. “Si me llaman, voy”, dijo el economista, con su típico estilo llano y desacartonado.
Reconoció, entonces, que con Sergio Massa, el precandidato de Unión por la Patria, puede intercambiar algún que otro chat, pero la conformación de este espacio -tanto de los integrantes de los equipos como el tono de las medidas- son de difícil encuadramiento en el universo del panperonismo que representa el la coalición política del gobierno nacional.
Además, en el encuentro hubo presencias sugestivas que expresan un alineamiento: el ministro de Hacienda porteño, Martín Mura, y el titular de la AGIP, el fisco de la ciudad, Andrés Ballotta, por parte de Larreta; y Alberto Förhing, por Bullrich, estuvieron presentes y participaron de los debates y el diseño de las medidas.
Para qué y con quiénes
Melconian estuvo acompañado por 70 profesionales especialistas en macroeconomía, comercio, industria, agro, energía, instrumentos sectoriales, trabajo, infraestructura, políticas sociales, transporte y modernización del Estado. Al equipo lo integran, entre otros, Enrique Szewach, Rodolfo Santángelo, Facundo Martinez Maino, Daniel Artana, Jorge Vasconcelos, Marcelo Capello y Juan Manuel Garzón.
El Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana presentó ante los socios de la Mediterránea los lineamientos generales y el avance del programa integral, federal y de cambio de régimen, que la Fundación le encargó al Instituto en diciembre de 2021.
La Fundación Mediterránea presentó los detalles del plan de gobierno, en un asado para los socios
“Los últimos días vivimos la dinámica política propia de un año electoral, con cierres de listas y candidaturas. Pero cuando las internas y elecciones terminen, lo que se va a necesitar es un equipo que tenga ideas y un programa integral que le devuelva un horizonte a la sociedad argentina”, sostuvo Melconian.
Y agregó: “Hoy, luego de más de una año y medio de trabajo, estamos acá para presentar en sociedad este equipo, del cual me siento orgulloso y confío que podrá devolverle un futuro a nuestro país”.
En cuanto a la diversidad en el armado del plantel Mediterráneo, Melconian explicó que el mismo está integrado por especialistas de distintos sectores de la economía; como así también macroeconomistas que colaboran con él en el armado de los principales lineamientos del programa.
En ese sentido, participan, entre otros, Enrique Szewach, Rodolfo Santangelo, Daniel Artana, Facundo Martínez Maino, Jorge Vasconcelos, Marcelo Capello y Juan Manuel Garzón.
Por otro lado, la visión federal del plan está representada por las filiales que la Mediterránea tiene en todo el país, coordinadas por sus economistas jefes: los mencionados Vasconcelos y Capello (CABA y Córdoba respectivamente), Gustavo Reyes (Mendoza), Jorge Day (Comahue), Carolina Beltramino (Litoral), Gerardo Schwarz (NEA) y Lucas Dapena (NOA). La jornada consistió en dos tramos: durante la mañana, se realizó una reunión interna donde Melconian y equipo debatieron los avances del programa en cuanto a algunas de las temáticas que contempla: Santangelo expuso sobre el plan de estabilización y Artana sobre el equilibrio fiscal; Capello hizo lo propio con la reforma tributaria y la relación nación – provincias; Garzón presentó la política agroindustrial; Jorge Colina introdujo los lineamientos sobre política previsional y laboral; la economista Laura Caullo expuso temas relacionados a la política social; Andrés Ibarra sobre modernización del Estado, Marcos Pourteau acerca de energía y Mauricio Butera sobre defensa de la competencia.
Por la mañana, Carlos Melconian reunió al equipo y terminó de hilvanar y homogeneizar las propuestas que luego presentó a los socios de la Fundación Mediterránea
Por la tarde, se llevó a cabo un encuentro con almuerzo incluido para compartir los avances con los socios de la Fundación Mediterránea, empresarios grandes, medianos y chicos de los principales sectores económicos de todo el país. Previo a terminar la jornada, Melconian resaltó: “Estamos encarando la recta final de nuestro trabajo. Nos falta ahora ir cerrando la sintonía fina de cada tema, plasmarlo en las normas legales y regulatorias que se van a necesitar, e ir consolidando el equipo. Se vienen meses de más intensidad todavía que los que ya hemos transitado”.
“La Argentina tiene las condiciones para superar esta larga etapa de estancamiento y decadencia, pero no se trata de voluntarismo vacío. Se trata de la política, de programa y de equipo, y nosotros pondremos nuestra parte”, advirtió Melconian, que fue detallando, una a una, las ideas que se discutieron y que está previsto que serán propuestas al próximo presidente electo.
La exposición de Melconian
Al empezar su exposición, el titular del IERAL dijo que el norte del plan de gobierno apunta a poner en marcha “un cambio de régimen económico” que se basará en un trípode que supone estabilidad macroeconómica, una profunda reforma del sector público y la “desobstrucción del sector privado”.
El marco conceptual, según explicó el economista ante los técnicos y luego al público en general, es que no sea “un plan de ajuste que prepare el crecimiento”, sino “un cambio estructural que genere condiciones para la inversión y empleo privado”. Pero puntualizó que nada se puede hacer sin “estabilizar” una economía que viene con sus variables fuera de quicio. Por eso, explicaron, la meta es cuanto menos “derrumbar la tasa de inflación”.
Sobre la estabilidad, el programa plantea medidas para establecer una nueva política fiscal, una mejor gestión de la deuda pública, una reforma del Banco Central y cambios decisivos y rápidos en el régimen cambiario. Sobre esto último, el programa de Melconian tiene por objetivo “diseñar un régimen cambiario que elimine todo el laberinto regulatorio”, aunque reconoció que el detalle fino para ponerlo en marcha dependerá “de las condiciones iniciales, vinculadas a reservas netas, stock de pagos atrasados, acuerdos internacionales -sobre todo el FMI- entre otros”.
“Es necesario institucionalizar la bimonetariedad. La Argentina ya es bimonetaria y vamos a ir a un sistema de incentivos para que fluya nuevamente un mercado de capitales en dólares, que permita el crédito y la inversión local de grandes y pequeñas empresas e inversores”, afirmó el programa presentado en la estancia cordobesa, que implica “que el peso y el dólar convivan”.
Pero para que esa idea se pueda poner en marcha, Melconian habló de dos “anclas” que requerirán la economía, donde el déficit fiscal tiene una dimensión decisiva sobre el resto de los agregados y partes del paquete de medidas. En ese sentido, el objetivo es reducir un total de 3,5% a 4% del PBI, un volumen que surge de reducir subsidios económicos, gastos públicos, y achique de la dimensión del Estado como una baja en las asistencias que requieren las empresas públicas. Así, se apuntaría a lograr un “déficit cero inmediato”.
También habló de “la bola de las Leliqs”, a la que definió como “un problema” que surge por los déficits fiscales y la compra de deuda interna de los últimos años, postergada y acumulada en el pasivo del Banco Central”. Pero Melconian advirtió que “sin romper contratos ni afectar los depósitos de los ahorristas, se puede ir desarmando sin generar una explosión”.
“La estabilidad va a requerir nuevas reglas para el mercado y el sistema financiero, que incluyen el desarme de la maraña regulatoria surgida de llevar el cepo cambiario desde el Banco Central a la CNV y el resto de los entes reguladores”, destacó la propuesta de la Fundación Mediterránea.
Las leyes del “primer día”
El titular del IERAL explicó que las iniciativas a aplicar el primer día podría adquirir dos lógicas posibles y diferenciadas: o bien una ley ómnibus, al estilo de una “ley de emergencia” o la incorporación del paquete de reformas junto al envío de una nueva ley de presupuesto que incorpore todo.
Más allá del formato, las reformas de primer orden que mencionó el economista en su presentación incorporó a las relaciones laborales y otra que reforme el sistema previsional, que para Melconian representa “una gran señal para la sostenibilidad fiscal de largo plazo”. A esas se agrega una reforma del Estado, que supone “cambios en la dotación de personal, de contratos, desregulación y foco en las empresas públicas. Reforma tributaria, de la AFIP y Aduana, una nueva Ley de Ministerios, para reducir de los 18, un número más cercano a los ocho históricos. Una reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, para garantizar su independencia.
Retenciones y comercio
Sobre la agroindustria, Melconian aclaró que su programa no incorpora en el corto plazo una rebaja indiscriminada en las retenciones de los grandes cultivos que generan los recursos gruesos del Estado: ni soja, ni trigo ni maíz están, por lo pronto, como inminentes. Sí, en cambio, aquellos que son relevantes para economías regionales.
En el caso del área de Defensa de la competencia y del consumidor, Melconian planteó la necesidad de revisar “el concepto de interés económico general con criterios más modernos”, normalizar con la designación de todos los integrantes de la Agencia Nacional de Competencia y crear una unidad de monitoreo de colusión en compras públicas.
Infraestructura
El titular del IERAL fue contundente: “hay pocos recursos fiscales y muchas necesidades”, pero aclaró que el orden de prioridades estará en definir las obras más importantes y urgentes de jurisdicción nacional, que se vinculan con sector de energía, gasoductos, obras sanitarias de AySA en provincia de Buenos Aires, dragado de la denominada Hidrovía y en trenes de carga”. Una de las frases de mayor impacto que pronunció Melconian estuvo vinculada a desmitificar que las obras gasíferas puedan acelerar una reversión absoluta del déficit por un superávit comercial sectorial de 20 mil millones de dólares.
Energía
En este punto y relacionado con lo anterior, Melconian habló, primero, de que es un sector donde la honestidad tiene un valor fundamental. “Acá no tiene que haber joda”, advirtió. Pero en concreto habló sobre las medidas que tendrán que aplicarse en torno a las tarifas y recordó que, debido a que el actual gobierno está aplicando aumentos del orden del 200 por ciento, “no debería haber problemas en las calles”.
“Hay que completar la renegociación integral de los contratos de las distribuidoras eléctricas y apuntar a una convergencia rápida para que los precios cubran los costos eficientes de producción, manteniendo la tarifa social”, manifestó.
Mercado laboral
Melconian resaltó que se trata de unos los aspectos centrales que deberá encarar el futuro gobierno. Si bien dijo que es un área específica del Ministerio de Trabajo y no del de Economía, se pronunció a favor de reducir el costo laboral, enfocado sobre todo en las pequeñas y medianas empresas.
La eliminación de las penalidades de multiplican las indemnizaciones, el cambio en la lógica de convenios colectivos con ultraactividad -gremios que discuten condiciones de trabajo con grandes empresas que se aplican a todas y que se prolongan de manera indefinida- y promover una figura diferente como el “despido optativo” que evite recargar el costo de la desvinculación cuando no es el empleador el que lo decide.
Planes sociales
El economista advirtió que “si bien no es responsabilidad directa del Ministerio el diseño de un nuevo esquema de planes sociales, resulta imprescindible minimizar” el impacto presupuestario y, al mismo tiempo, “hacerlos más eficientes”.
“Toda la reformulación, desintermediación y descentralización del Potenciar Trabajo, el plan más grande que aplicar el Estado, debe contemplar duración temporaria, eliminación de superposiciones con otros beneficios, capacitación y una bolsa de trabajo privada, que incorpore incentivos para empresas y trabajadores”.
Reforma previsional
Entre las propuestas, el economista señaló la cuestión de las jubilaciones y pensiones como de un tema de primera magnitud. “La pauta de movilidad tiene que ser la tasas de inflación esperada más eventual ajuste ex post por inflación observada”, planteó Melconian.
Entre las decisiones que propuso se destaca el cierre de las moratorias que amplían de manera permanente la cantidad de beneficiarios. Eliminar el requisito de los 30 años de aportes, tomar para la definición del cálculo de los haberes los sueldos cobrados durante toda la vida laboral. Y que la PUAM (Prestación para el Adulto Mayor) rija para aquellas personas que no alcancen un ingreso mínimo.
Eliminar regímenes especiales para los nuevos ingresantes al mercado laboral “para que todas las personas puedan jubilarse, dentro de 30 años, con un único régimen general”.
Empresas públicas
El titular del IERAL destacó durante su exposición que, lejos de lo que se comenta y que está instalado en la agenda pública, Aerolíneas Argentinas no es de las empresas públicas que mayor cargo le genera al Estado y cuestionó por irreal e impracticable la idea de “cerrarla y abrir otra aerolíneas al día siguiente”.
“Hay empresas para cerrar, traspasar a provincias o redimensionar”, planteó Melconian, aunque evitó dar una precisión sobre qué verbo le aplicará a cada quién. Lo cierto es que en primera línea están AYSA, Yacimientos Carboníferos Fiscales, todo el sistema de medios públicos, el Correo Argentino, IMPSA.
“Estamos considerando una organización centralizada, tipo holding, que establezca acuerdos y programas, con un management profesional”, dijo el economista y agregó: “Hay que analizar qué es lo que hay adentro.
En el caso de YPF, los equipos de Melconian resaltaron que se trata de “una empresa con alto potencial, en un marco de cooperación con otras empresas petroleras” y que la idea es mantener el esquema de un presidente, secundado por un CEO profesional”.
Relación Nación-Provincias
El vínculo político y financiero entre el presidente y los gobernadores es clave y uno de los déficit que tuvo la gestión de Mauricio Macri. Para el IERAL se debe promover que las provincias “adhieran a mejoras competitivas” y avanzar con un “acuerdo federal”, que involucre a los tres niveles jurisdicciones, nación, provincias y municipios. Acá, la clave es encontrar mecanismos para avanzar de manera realista en la reducción de Ingresos Brutos, que es un recurso vital para muchos mandatarios.
Impuestos y AFIP
Entre los aspectos centrales del paquete de medidas se destaca la reforma tributaria, con especial énfasis en Ganancias, Monotributo, la eliminación de pagos salariales no remunerativos y la aplicación del famoso ajuste por inflación en quebrantos de empresas.
El plan que presentó Melconian incorporó un capítulo de reforma integral de la AFIP-Aduana, que apunta a una mejor gestión hacia adentro de esos organismos pero también hacia afuera, para lograr mayor eficacia en la recaudación tributaria.
Reforma del Estado
Melconian abordó también la cuestión del tamaño del Estado y tomó distancia del denominado “plan motosierra” que promueve en los medios y en su plataforma el liberatario Javier Milei. En ese sentido propuso un nuevo organigrama, con menos ministerios, secretarías y direcciones, reducción de dotaciones en el primer año de gestión, con un objetivo de alcanzar una merma del orden del 25% en el primer año.
Durante la charla, Melconian advirtió que el país se enfrentará en las próximas semanas a un escenario de “tres transiciones”, que van a ser claves para enfrentar lo que viene. La primera tiene que ver con el reconocimiento de los problemas presentes -sobre todo porque la marcha de la crisis van a poner en superficie de manera cada vez más evidente la “pesada herencia” que tendrá por delante el gobierno que siga, sea del signo que fuere.
La segunda tiene que ver con que el resultado de las PASO puede ser un mojón, un punto de arranque para que empiece a germinar un proceso colaborativo entre los que van y los que vienen. Pero si la definición pasa a octubre o a noviembre -producto de que se registre una paridad que nadie quede como claro ganador y derrotado- la situación puede volver todo más complejo.
Y la última transición que mencionó Melconian tiene que ver con el plazo que se abre entre la conclusión del proceso electoral y la llegada del nuevo gobierno. Se trata de “los primeros pasos” que tendrá que tener listo el equipo económico que asuma, que tiene por delante el urgente desafío de reponer a la economía argentina en una senda sustentable y consistente de crecimiento.